Ada Colau lleva su presupuesto a aprobación sin mayoría
La negativa de la CUP y C’s a apoyar a la alcaldesa augura una dolorosa derrota
Salvo sorpresa de última hora, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, no podrá aprobar en el pleno de hoy su plan de inversiones por falta de la mayoría suficiente tras el último rechazo de la CUP y de Ciutadans.
La modificación presupuestaria se debate hoy en un pleno extraordinario al que el equipo de gobierno llega solo con el apoyo de PSC y ERC tras la negativa de última hora de la CUP. El inesperado no de los anticapitalistas anunciado el pasado viernes lleva a Ada Colau a quedarse sin la ansiada mayoría. Este mediodía se enfrentará a uno de sus momentos más complicados desde que llegó a la alcaldía. Todas las inversiones previstas quedarán en un cajón y el margen de maniobra para hacer cosas nuevas se reduce a cero.
Ante este panorama, Ciutadans movió ficha ayer después de una llamada de BComú invitándoles con urgencia a empezar a negociar. Mejías se reunió con el equipo del teniente de alcalde Gerardo Pisarello durante media hora para tratar de desencallar la situación y entregarle un documento con quince líneas de actuación que buscan “atender la emergencia social y reorientar el modelo económico de la ciudad”. La formación naranja dejó claro que descarta votar a favor o abstenerse en la modificación presupuestaria (lo que permitiría sacar adelante las cuentas) “porque no responde al interés general de la ciudad y deja los presupuestos municipales bajo la tutela de la Generalitat”. No olvidan, además, que el equipo de gobierno rechazó hace unas semanas todas las alegaciones de C’s, –también las de CiU y del PP–, así que ahora no tienen ninguna intención de salvarle los muebles.
Mejías quiere aprovechar la minoría en la que está Colau para entrar en juego con una alternativa, pero sin prisas. El partido rechaza la fórmula de la modificación presupuestaria de 275 millones de euros con aportaciones de socialistas y republicanos. El documento que planteó ayer al equipo de gobierno habla de otro escenario: un futuro presupuesto que debería empezar a negociarse desde cero y de manera más amplia. “Ha llegado el momento de abrir una nueva etapa de diálogo para poner Barcelona en funcionamiento”, dijo ayer Mejías, llamando al consenso tras emplazar al resto de grupos políticos a trabajar de manera conjunta para definir y aprobar los presupuestos “partida por partida”. Esa hipotética negociación de futuro debería, según Mejías, sumar a Ciutadans y al resto de la oposición con el objetivo de “alcanzar acuerdos mayoritarios que busquen el interés de todos los barceloneses”. Las partidas destinadas a fines sociales, el pago del 1% a los funcionarios y la rebaja del IBI a familias en situación de vulnerabilidad son aspectos que C’s votaría a favor si se debaten fuera del marco de la modificación presupuestaria.
Más allá de lo inmediato, las quince propuestas planteadas por Ciutadans inciden en aspectos estratégicos del gobierno de Colau. Sugieren la reorientación del plan especial urbanístico de alojamientos turísticos, el levantamiento de la moratoria hotelera en los distritos sin presión turística, la reformulación de la ordenanza de terrazas, la implementación de un plan de seguridad para combatir el top manta y el desalojo de todos los inmuebles de titularidad municipal ocupados ilegalmente. También se plantea la elaboración de un plan director de infraestructuras para la ciudad en el que “se establezca el reconocimiento de deuda, el calendario de ejecución y las garantías de devolución de las cantidades avanzadas por la hacienda municipal”, según Mejías. Además, en el listado se incluye ampliar el alcance del código ético del Consistorio para “acabar con el enchufismo de familiares y amigos” y se exige “un compromiso de respeto a las instituciones democráticas” que descarte la adhesión del Ayuntamiento a la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI).
La idea de Ciutadans es que a partir de ahora se empiece a hablar de los diferentes temas puestos sobre la mesa para ir avanzando uno por uno. “Deben reorientar su actitud, su manera de hacer las cosas y buscar acuerdos”, valoró la líder de C’s. Hasta ahora, según Mejías, el diálogo con el equipo de gobierno ha sido escaso y “se ha llegado a una situación de bloqueo inadmisible”. Si no se produce ningún giro imprevisto de última hora, la modificación presupuestaria no saldrá adelante. Colau deberá decidir entonces si trata de reconducir la postura de la CUP o toma la mano que le tiende Ciutadans con medidas alejadas del programa político de BComú. Y todo ello sin perder al PSC y ERC, dos partidos que pueden convertirse en aliados de una manera estable.
Ciutadans pide la reformulación de planes estratégicos del gobierno municipal Carina Mejías quiere un presupuesto al uso y no una modificación como la planteada