‘Okupada’ la Llotja de Avinyó para acoger refugiados
La vieja Llotja de la calle Avinyó es el último edificio público okupado en Barcelona. En este caso no es del Ayuntamiento. El inmueble, que llevaba más de un lustro sin uso, es de la Generalitat. Varios activistas lo tomaron el domingo durante el revuelo de las manifestaciones del Primero de Mayo. Su objetivo declarado es enmendar la plana a los políticos y hacer lo que las adminis- traciones no están haciendo: acoger refugiados, formar parte de una red europea de lugares okupa
dos con este fin. Al menos eso es lo que aseguran los okupas, quienes rebautizaron el edificio El Borsí, con el nombre campamento en árabe. El popular Alberto Fernández exigió ayer que el lugar sea desoku
pado lo antes posible, y recordó que está calificado como equipamiento y que en estos momentos la Generalitat negocia su cesión al Ayuntamiento. Muchas entidades del Gòtic pidieron a finales de año que las administraciones acordaran cuanto antes un uso del inmueble que beneficiara a todo el barrio. Anteriormente se planteó que Mediapro lo convirtiera en un museo sobre Woody Allen, pero aquella idea perdió fuerza.