A Madonna se le abre otro frente familiar
Los parientes biológicos de su hija Mercy quieren recuperarla
Tras casi cuatro meses de lucha en los tribunales, Madonna y su hijo Rocco (15) se han reconciliado, como muestra la fotografía que colgó el domingo la cantante en Instagram. Madonna llevaba varias semanas en Londres para intentar arreglar la relación con su hijo, que antes de Navidad decidió que prefería vivir con su padre Guy Ritchie y su nueva familia en la capital británica. Pero a tenor de la imagen publicada, con el texto “We need” (Necesitamos), parece que madre e hijo han podido arreglar sus diferencias.
Pero ahora se le ha presentado un nuevo problema con Mercy James (10), la menor de sus hijos, a la que adoptó en Malaui en el 2009, cuando tenía tres años. La familia biológica de la pequeña quiere recuperarla. En el 2006, Madonna ya adoptó a otro niño de Malaui, David Banda, cuando tenía un año, y hubo también problemas con el padre del niño, pero finalmente aceptó la adopción.
En el caso de Mercy James, la madre, una adolescente de 15 años llamada Mwandida, murió ocho días después de dar a luz en casa. La que fue su mejor amiga, Agatha Molande, ha explicado en declaraciones al Daily Mail que la familia de la niña quiere ahora iniciar acciones legales en contra de la agencia de adopción, que entregó la pequeña a Madonna. Según su versión, tras la muerte de la madre fue llevada al orfanato para que le dieran los primeros cuidados ya que su familia no podía ocuparse de ella, pero “nunca tuvieron la intención de separarse definitivamente de ella”, ha explicado Agatha. Y añade: “Tenían un acuerdo con el orfanato para que Mercy volviera con ellos al cumplir los seis años, ya que se cree que a esa edad su organismo ya es inmune a muchas enfermedades. En Malaui es una práctica normal que los orfanatos funcionen como casa de acogida para niños menores de esa edad, que luego regresan a casa. Pero al parecer se ha interpretado erróneamente y se ha creído que al estar en el orfanato Mercy ya no importaba a su familia o que estaban muy felices de que hubiera sido adoptada”.
Molande asegura que la familia ha pedido a Madonna en repetidas ocasiones ver a la niña, pero la cantante se ha negado. Añade que la familia no va a ceder en su lucha por recuperar a Mercy, porque no se han cumplido los derechos de visita y su eventual retorno, Además aseguran que han perdido el contacto con la pequeña, aunque reconocen estar felices porque ha podido recibir una educación y piden que se aclaren las verdaderas condiciones de adopción, en la confianza de poder llegar a un acuerdo con Madonna.
La cantante ha respondido diciendo que “a Mercy nunca se le ha ocultado su pasado o su heren-
La felicidad por la reconciliación con Rocco se ve empañada; ahora le cuestionan la adopción de su hija
cia y que cada año visita Malaui para aprender sobre sus raíces y para visitar a amigos y familia”.
Agatha Molande, de 25 años, recuerda a su amiga Mwandida, la madre de Mercy: “En la escuela era una alumna muy brillante. Vivía con su madre y la ayudaba en todas las tareas de casa. Hacía más de lo que le correspondía por edad. En la secundaria conoció a un chico más mayor, se volvió reservada y las notas bajaron. Fue un shock cuando supimos que estaba embarazada y después su muerte. Su sueño era ser enfermera o contable”.