Pesimismo moderado
Zidane no habla de maletines pero no defiende a los jugadores del Granada
El Madrid busca hoy en Riazor la carambola que nunca se ha producido a lo largo de su historia: adelantar al primer clasificado en la última jornada y ganar la Liga. Necesita vencer en Riazor a un Deportivo que no se juega nada y que el Barcelona no se lleve los tres puntos del Nuevo Los Cármenes. La situación a la inversa sí se ha producido. El Madrid perdió tres Ligas en la última jornada con sus derrotas en Mestalla ante el Valencia en 1983 (se llevó el título el Athletic) y las dos más recientes de Tenerife, en 1992 y 1993 (que fueron a parar al Barcelona de Johan Cruyff).
En el madridismo ahora mismo hay más ilusión y confianza en la final de Champions del día 28 en Milán que en la hipotética victoria en la Liga, que se ha dado ya por perdida reiteradas veces los últimos meses. De hecho, los blancos llegan vivos al partido de A Coruña tras agónicas victorias ante el Rayo Vallecano, la Real Sociedad y el Valencia.
La buena noticia para Zidane es que tiene a toda la plantilla recuperada salvo a Lucas Vázquez, lesionado por un esguince de rodilla. El Madrid jugará con su equipo de gala, presumiblemente el mismo que presentará en San Siro. Las horas previas no han sido de demasiada tensión. Zidane no quiso ayer calibrar el porcentaje de posibilidades de su equipo y rehusó contestar cualquier pregunta sobre presuntos amaños y maletines, un tema recurrente en el fútbol español a estas alturas de la temporada.
Cuando se le preguntó al técnico francés si se debían legalizar las primas a terceros, se molestó: “No sé de lo que me hablas. De verdad. Yo sólo me concentro en el partido y cómo ganarlo. Es lo único que me interesa porque es lo único que podemos controlar. El resto, ni miro ni escucho. Me interesa lo que vamos a hacer nosotros”.
Preguntado si creía en la profesionalidad de los jugadores del Granada prefirió no contestar tampoco: “No es por ninguna estrategia pero yo sólo puedo hablar de lo que vamos a hacer nosotros: hacer nuestro trabajo y sumar”.
A pesar del ambiente de poco optimismo, el Madrid tiene preparado el Bernabeu para abrirlo esta noche y celebrar el título con su afición. El Ayuntamiento no tiene ningún dispositivo en Cibeles. El
El Madrid nunca ha adelantado al primero en la última jornada, pero perdió el título tres veces
partido le coge al Deportivo ya salvado pero en un clima de crispación en la plantilla. Alejandro Arribas desveló ayer en rueda de prensa interioridades del vestuario que reflejan la mala relación general con Luisinho, apartado del equipo, y dudas sobre la profesionalidad de varios jugadores: “Hay jugadores que hemos remado en la misma dirección siempre, pero otros no han sido lo suficientemente profesionales y por eso el entrenador no ha contado con ellos”.