La ANC, abocada a un difícil consenso para escoger al presidente
El nuevo presidente de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) necesitará, para serlo, dos tercios de los votos de los 77 miembros del secretariado nacional escogidos anteayer por la militancia. Pero con los resultados en la mano, la designación de la cara más visible de la entidad se prevé complicada.
Según fuentes de la organización, aproximadamente unos 35 de los futuros integrantes de la dirección apostarían por la línea continuista marcada por el actual presidente, Jordi Sànchez, mientras que 42 se inclinarían por el cambio. Un cambio que abanderarían la ganadora de las elecciones, Liz Castro, el expresidente de Òmnium Cultural Quim Torra o el exdiputado de la CUP Antonio Baños.
Con estos números, y unas elecciones más bipolarizadas que nunca, los nuevos miembros del secretariado sudarán la gota gorda para nombrar a su presidente en la reunión del 21 de mayo, si no hay un consenso previo.
“Lo veo negro; hay una mayoría de cambio, pero no suficiente como para darlo por hecho”, admite uno de los escogidos a este diario. “Todo el mundo está obligado a ceder”. Y es que Castro, que superó otra vez a Sànchez en las elecciones para el secretariado, parece dispuesta a presentar su proyecto para ser la presidenta de la asociación, a pesar de no generar el máximo consenso
Enfrente, Sànchez, que en declaraciones a La Vanguardia, deja abiertas todas las posibilidades: “Corresponde a la ganadora dar el primer paso; después ya veré qué hago”.
Castro y Sànchez se disputan el liderazgo después de las elecciones más bipolarizadas
Aparte de estos nombres, Baños, tercero en las elecciones, ya se autodescartó para liderar la ANC. Torra, cuarto en las votaciones, tampoco parece dispuesto, ya que juzgó que el presidente debería ser el más votado.
En todo caso, habrá que ver cómo se resuelve el sudoku y qué movimientos hacen estos días Castro y Sànchez, sin descartar otros nombres de consenso, como podría ser el de la catedrática de economía, Clara Ponsatí.