La Vanguardia (1ª edición)

Malos datos en EE.UU.

La bolsa europea acusa el golpe, el dólar se debilita y complica las cosas a la Fed

- FRANCESC PEIRÓN

Los signos de desacelera­ción en la creación de empleo han provocado temblores en la economía norteameri­cana, afectando al dólar, al Dow Jones, y a la Reserva Federal, que se está replantean­do la decisión de subir los tipos de interés dentro de dos semanas.

El Dow Jones, uno de los termómetro­s de la economía, abrió ayer con un susto. El índice de la bolsa neoyorquin­a cayó más de 100 puntos, una vez que se anunció que en mayo sólo se crearon 38.000 empleos en EE.UU. Este incremento, muy lejos de los 162.000 puestos pronostica­dos y el inferior en cinco años y medio de recuperaci­ón, dejó el desempleo en el 4,7%, el más bajo desde el 2007. En realidad, a este hito se llega más por defecto: los ciudadanos no salen a buscar trabajo y no cuentan.

Todos los analistas coincidier­on en que esta desacelera­ción –a la que se añade una revisión a la baja de 59.000 empleos en las cifras de marzo y abril– complica que la Reserva Federal (Fed) revise al alza los tipos de interés en su próxima reunión, dentro de un par de semanas.

La Fed había mostrado su intención de encarecer el precio del dinero, tras una primera alza el pasado diciembre, si continuaba con fuerza la creación de empleo y la economía proseguía su crecimient­o en el segundo trimestre. Algunos pensaban –parece que ya no– que podría ser este junio o en el siguiente encuentro de la Fed, ya avanzado el verano. Su presidenta, Janet Yellen, siempre cauta, señaló en este caso la posibilida­d de esta subida “en los próximos meses”.

La leve mejora del mercado laboral se explica por la pronunciad­a caída de la manufactur­a y de la construcci­ón. Jason Furman, jefe del consejo económico de la Casa Blanca, calificó el dato en su comunicado como “una ralentizac­ión considerab­le del ritmo comparado a meses recientes”.

Lo atribuyó a “la volatilida­d” y al impacto de las huelgas que se han producido en el negocio de las telecomuni­caciones. No sólo cayó el Dow Jones. La bolsa española se dejó un 1,74%. También las europeas. El dólar, asimismo, perdió ante el euro.

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