“Querida explotación, te dejo”
Carta de renuncia de una médica por las condiciones laborales de “esclavitud”
“Estoy en la calle.
He renunciado a mi contrato de guardias. He renunciado a la explotación laboral sangrante y despiadada.
He renunciado a la esclavitud de un sistema sanitario absurdo que trata a sus profesionales como basura.
He renunciado al pisoteo de un jefe que, como tantos otros en la medicina española, maneja su servicio como si fuera su cortijo. Un jefe que no lidera, sólo tiraniza.
He renunciado a trabajar en un sistema con médicos de primera que viven a costa de médicos de segunda.
He renunciado a turnos de 24 horas sin derecho a descanso que ponen en peligro mi salud y la seguridad de mis pacientes.
He renunciado a trabajar con excelentes profesionales que han ido olvidando lo que fue su orgullo personal y profesional y lo que fue su dignidad y ahora simplemente bajan las orejas con miedo”...
No sé si la doctora Mónica Lalanda, médica de urgencias con una experiencia laboral de 25 años, 16 de ellos en el Reino Unido además de máster en Ética Médica y Bioderecho, se imaginó que su carta de renuncia a su puesto de trabajo, publicada el pasado día 3 en su blog medicoacuadros.wordpress.com iba a tener tanta repercusión en las redes sociales, ni que sirviera para exponer las vergüenzas del sistema laboral sanitario. Y más aún, que esta carta fuera un acicate para que los siempre esquivos médicos se lanzaran públicamente a explicar la “lamentable” situación en la que se encuentran muchos profesionales, “explotados”, “ninguneados” y “esclavizados” por unos gestores y jefes “mediocres”, “deshumanizados”, a los que “no les importa ni el profesional ni los pacientes”.
Su decisión de renunciar e irse “a la calle” no sólo fue aplaudida por los centenares de facultativos que se hicieron eco de su misiva sino que sirvió para animarse mutuamente para tomar una decisión similar. Aunque muchos reconocían que no podían hacerlo por su situación económica.
Entre los tuiteros, Juan José Rodríguez Sendín, presidente de la Organización Médica Colegial, quien, tras expresar su “pena” por la decisión de Lalanda, dice entenderlo: “No hablamos de ser médica sino de no sentirte indigna por el trato y condiciones del ejercicio de tu profesión”.
“¿Y si todos los médicos explotados hiciéramos lo mismo?”, pregunta un facultativo. El sistema de salud, ese del que España está tan orgulloso por su calidad, se hundiría, responden otros.
“Querida explotación, no cuentes más conmigo”, señala la doctora Mónica Lalanda.
La misiva se ha hecho viral y centenares de médicos han aireado sus “lamentables” condiciones de trabajo