La Vanguardia (1ª edición)

Dictadores sin cabeza

-

SOBRE el Born Centre Cultural podemos hacernos muchas preguntas; por ejemplo, si ese proyecto se merecía de verdad una inversión de 85 millones de euros, o si en sus primeros años se acentuó demasiado su papel como icono de la reivindica­ción soberanist­a. Pero lo que es innegable es que ha conseguido situarse en el epicentro del debate cultural y político de Barcelona y Catalunya. Aunque se trate de un efecto no siempre deseado, no es poca cosa. Otra gran inversión de la época, el Disseny Hub, yace en las Glòries sin que nadie se acuerde de él.

La sección de Política analiza hoy cómo y por qué el Born se ha convertido en un campo de batalla dialéctica entre las fuerzas independen­tistas y la izquierda que gobierna ahora el Ayuntamien­to, una batalla en la que se utiliza armamento dialéctico pesado. En medio de este debate, surgida de un oscuro almacén emerge la estatua ecuestre de Franco que el Ayuntamien­to quiere ubicar temporalme­nte junto al antiguo mercado en el marco de una exposición. Una cuestión no menor es que se trata de una escultura decapitada (no se sabe por quién), lo que la entronca con otras esculturas derribadas o destruidas que se han convertido en símbolos de la lucha de los pueblos contra el tirano. Ahí están el Stalin destruido en Budapest en 1956; la cara de Mubarak arrancada en el 2011 de una estatua en El Cairo; el Sadam Hussein derribado en Bagdad en el 2003; el Lenin que se fue con el comunismo a otra parte en Addis Abeba en 1991...

Si bien es obvio que la estatua de Franco no la derribaron las masas, su decapitaci­ón accidental la eleva a la categoría de icono de dictador caído. Y como siempre que hay un debate tendemos a mentar a Hitler, aquí tenemos un paralelism­o, este sí, irrefutabl­e: en el 2008, un desconocid­o decapitó la estatua del Führer en un museo de cera de Berlín. “Por fin, un intento de asesinato de Hitler que acaba con éxito”, escribió un opinador de Der Spiegel.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain