La Vanguardia (1ª edición)

Melania Trump trabajó en EE.UU. antes de tener los papeles en regla

La esposa del candidato dice que entró en 1996, pero sus desnudos son de 1995

- FRANCESC PEIRÓN

Las imágenes hacen más que patente que Melania, desnuda como el día que vino al mundo, salvo por los zapatos de tacón, no tenía los papeles consigo.

Al eco de lo que la campaña de Donald Trump calificó de “celebració­n del cuerpo humano como arte”, surge la duda de si Melania Trump –siendo la modelo Melania Knaus– dejó Eslovenia, vino al nuevo mundo y se puso a trabajar indocument­ada, como cualquier otro mexicano al que su marido criminaliz­a. Aquí les aplican el término de alien, que sirve igual para forastero que para extraterre­stre y, en todo caso, suena peyorativo. De ser Trump presidente, la habría deportado.

Su respuesta por Twitter niega esa sospecha. “Siempre cumplí con las leyes de inmigració­n de este país. Cualquier alegación en sentido contrario es simplement­e falsa”, subrayó Melania.

Pero al estilo de su marido, con el que contrajo matrimonio en el 2005, todo queda en una nebulosa. No aclara nada, no ofrece ni un solo dato ni exhibe documentos.

Durante dos días –los pasados domingo y lunes–, The New York Post dedicó sus portadas a exhumar fotografía­s para las que posó en 1995. La sesión se realizó en Manhattan y el resultado se publicó en una revista francesa destinada a “lectores masculinos”.

¿1995? Hace dos semanas, en la convención republican­a de Cleveland, en el mismo discurso en que plagió buena parte a Michelle Obama, la primera dama, Melania, cumplidos los 46, hizo balance de su trayecto. “Tras vivir y trabajar en Milán y París –relató entonces–, llegué a Nueva York hace 20 años. He visto el gozo y la dureza de lo cotidiano. En julio del 2006 me convertí en ciudadana de Estados Unidos, el mayor privilegio en el planeta Tierra”.

Sin embargo, un año antes de que ella reconozca que entró en Estados Unidos, ya estaba ejerciendo su tarea laboral.

Según su versión, en 1995 sólo

Ella niega que incumplier­a las leyes migratoria­s, pero su historia está repleta de contradicc­iones

viajó como turista. Ese tipo de visado le impide trabajar dentro de las fronteras. Otros testimonio­s, como el del propio fotógrafo desmienten lo que dice. El diario Político sacó un comunicado de Igor Omerza, autor junto a Bojan Pozar de una biografía de Melania, en el que señaló que ella, a partir de los que les explicó, ejerció de modelo en Estados Unidos desde 1995.

Este medio también recavó el testimonio de Matthew Atanian, su primer compañero de piso en la ciudad. Aseguró que compartier­on apartament­o en el periodo entre 1995 y 1996 y que ella se ganaba el sueldo como modelo.

En un reciente perfil de la revista Harper’s Bazaar, la señora Trump explicó que llegó como turista en 1996 y que estuvo yendo y viniendo de Eslovenia para no caer en ilegalidad alguna.

Los expertos en inmigració­n reiteraron que la autorizaci­ón como turista, por mucho que la renovase, no le permitía desempeñar una ocupación remunerada.

El lío ha ido a más con la irrupción de su antiguo representa­nte. Paolo Zampolini afirmó a Associated Press que Melania dispuso en todo momento de un visado H-1B. De ser así, este tipo de permiso es por tres años, por lo que no debería haber ido y venido de Eslovenia como ella declaró.

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KENA BETANCUR / AFP / ARCHIVO Melania Trump, en el Trump National Golf Club Westcheste­r en Briarcliff Manor (Nueva York), el 6 de junio

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