Barcelona estrena un Bicing motorizado y ecológico
La empresa Cooltra despliega un sistema pionero de alquiler de scooters por minutos para desplazamientos cortos por la ciudad
Barcelona es una ciudad llena de motos. Hay unas 280.000 y cada motorista va con la suya. Pero ¿y si se aplicara el sistema del Bicing a las dos ruedas motorizadas? Es lo que pensaron en Cooltra, la mayor empresa europea de alquiler de motos. La idea la llevaban madurando desde hace años pero la poca duración de las baterías daba al traste con el proyecto. La evolución tecnológica ha permitido al final que se haga realidad eCooltra, un sistema pionero de alquiler de motos eléctricas por minutos que ha empezado a funcionar este año en Barcelona.
A grandes rasgos es como el Bicing, pero más moderno. Las bicis pasan a ser motos eléctricas. Los aparcamientos se amplían hasta cualquier rincón de la ciudad. Y la tarjeta de usuario es una aplicación en el teléfono móvil inteligente. Actualmente hay 250 motos repartidas por toda la ciudad.
El invento es perfecto para los motoristas esporádicos como Marta Cillero. Antes tenía moto y gastaba en gasolina, taller y el correspondiente seguro. La cogía una o dos veces por semana para bajar de Sarrià al centro de la ciudad. Ahora usa eCooltra y paga 24 céntimos por minuto de uso. Ha hecho números y asegura que le sale a cuenta.
La mayoría de usuarios tienen entre 20 y 40 años y lo utilizan más de una vez por semana. La duración media de los trayectos es de 20 minutos, lo que supone 4,8 euros de gasto medio por viaje. “Es más barato que un taxi y da más libertad”, dice Pau Subirats, un usuario habitual del transporte público que ha descubierto este nuevo modo de transporte para cuando tiene prisa. A diferencia del Bicing, la moto no se deja en aparcamientos concretos, se aparca en cualquier lugar.
La autonomía del vehículo de 50
A través de una aplicación móvil se puede utilizar cualquiera de los 250 vehículos disponibles
cc es de unos 60 km, por lo que permite sobradamente desplazarse de punta a punta de la ciudad. Un equipo de seis personas va con furgonetas eléctricas cargadas de baterías recorriendo Barcelona. Cuando a una moto aparcada le queda poca autonomía se la cambian por otra.
Lo que más sorprende es el potencial tecnológico del sistema. El usuario geolocaliza las motos a través de la app, elige la moto más cercana, la reserva y la pone en marcha desde el teléfono móvil. “Las instrucciones que da antes de arrancar son claras y al llegar hay que hacer una serie de verificaciones para dar por apagada la moto”, explica el consejero delegado de eCooltra, Oriol Marimón.
La concejal de Movilidad, Mercedes Vidal, se muestra encantada con el proyecto. Considera una buena iniciativa “que el parque automovilístico que circula por la ciudad tenga diferentes usuarios”.El Ayuntamiento no está implicado en el proyecto, que es una iniciativa 100% privada, pero todo lo que potencie la movilidad eléctrica está bien visto por el actual equipo de gobierno municipal. La compañía ya piensa en ampliar el servicio.