Irán ejecuta a un científico nuclear que pasó información a EE.UU.
Irán ha ejecutado a un científico nuclear acusado de facilitar a Estados Unidos información clasificada. Un portavoz judicial dijo ayer a la prensa que Shahram Amiri, de 39 años, fue acusado de espionaje porque “suministró al enemigo información vital para el país”. El científico fue detenido el año pasado, procesado y encarcelado en secreto.
El caso se remonta al 2009, cuando Amiri hizo su peregrinaje a La Meca y desapareció. Al año siguiente pudo ser visto en una serie de vídeos grabados en Estados Unidos. Pero un día acudió a la sección de intereses de Irán en la embajada de Pakistán y pidió volver a su país. Allí fue bien recibido por las autoridades, y afirmó que había sido secuestrado e interrogado por espías saudíes, estadounidenses e israelíes en Medina (Arabia Saudí), que le ofrecieron 50 millones de dólares por quedarse en EE.UU. y que actuó sometido a tortura psicológica.
El portavoz judicial iraní, Gholamhosein Mohseni Ejehi, afirmó ayer que el científico contó con abogados en su proceso pero no explicó por qué no se anunció nunca su detención y juicio. Además, dijo que Amiri “nunca se arrepintió y en cambio trató de pasar información desde la cárcel”, aseguró Ejehi.
El año pasado, el padre de Amiri contó a la BBC que el científico estaba encarcelado en un lugar secreto. El pasado martes, al mismo tiempo que se anunció la ejecución de militantes kurdos iraníes empezó a circular la noticia de la muerte de Amiri en su ciudad natal, Kermansha, a unos 500 kilómetros de Teherán, según el diario reformista Shargh. Se anunció asimismo, en términos elogiosos para con el científico, un funeral a celebrar el jueves.
La noticia de la ejecución trascendió el sábado a través del canal de televisión por satélite Manoto, basado en Londres y considerado próximo a los monárquicos iraníes. Y el canal en farsi de la BBC citó a la madre de Amiri diciendo que el cuello del difunto tenía marcas de haber sido ahorcado.
En el 2010, funcionarios de Washington afirmaron a la agencia Ap que Amiri recibió cinco millones de dólares por dar a la CIA información sobre programa nuclear de Irán, aunque aparentemente abandonó EE.UU. sin el dinero. Amiri, según esta versión, viajó a Estados Unidos y permaneció en el país unos meses por propia voluntad. Su retorno a Irán se habría debido, a decir de algunos analistas, a que su familia sufrió amenazas del régimen.
El nombre de Amiri apareció el año pasado en uno de los polémicos correos electrónicos de Hillary Clinton mientras era secretaria de Estado. En uno de ellos, que le fue reenviado por un asesor nueve días antes de que Amiri regresa a Teherán, un funcionario del Departamento de Estado escribía: “Tenemos que facilitar la salida a nuestro amigo, debemos reconocer su preocupación (...) Nuestro hombre no puede hacer otra cosa. Si se tiene que ir, que así sea”.
Shahram Amiri desertó pero volvió a Irán por presiones a su familia, según un e-mail enviado a Hillary Clinton