La Fed de Nueva York ve posible tipos más altos en EE.UU. en septiembre
El presidente de la Reserva Federal (Fed) de Nueva York, William Dudley, pronosticó ayer “cierta aceleración” en las perspectivas de crecimiento económico de EE.UU. en la segunda mitad del año, por lo que consideró “posible” una subida de tipos de interés en la reunión de septiembre.
“Nos estamos acercando al punto en el que, creo, será apropiado subir más los tipos de interés”, dijo Dudley a la cadena Fox Business Network. “Pienso que es posible” elevar los tipos de interés en el encuentro de política monetaria de la Fed de mediados de septiembre, agregó.
“Creo que estamos viendo un crecimiento en la segunda mitad del año, que será más fuerte que en la primera mitad, con cierta aceleración en las perspectivas de crecimiento”, aseguró Dudley.
En la actualidad los tipos de interés de referencia se encuentran entre el 0,25% y el 0,50% en EE.UU., después de la subida en un cuarto de punto de diciembre, la primera en una década.
La próxima reunión de política monetaria de la Fed en la que se podrían subir los tipos, según Dudley, será el 20 y 21 de septiembre.
Pese a haber comenzado el año con unas previsiones de hasta un total de cuatro ajustes monetarios, el organismo dirigido por Janet Yellen ha postergado el encarecimiento del precio del dinero por las dudas sobre la economía global, como por ejemplo la ralentización de China o la inesperada votación en el Reino Unido a favor de la salida del país de la Unión Europea (UE).
Para el presidente de la Fed de Nueva York, considerado un influyente miembro del organismo y con voto fijo, “la mejoría en el mercado laboral ha empezado a dar signos de aceleración en los salarios”, algo que los economistas estaban echando en falta pese a la baja tasa de desempleo en Estados Unidos, que se encuentra en el 4,9%. Los principales banqueros centrales, entre ellos Janet Yellen, se reunirán del 25 al 27 de agosto en la tradicional conferencia de la estación de montaña de Jackson Hole (Wyoming) para comentar la política monetaria global, en un momento de bajos tipos de interés en las economías avanzadas.