Un mundo entre Bieber y King Crimson
La oferta de conciertos combina The Cure con Michael Kiwanuka o el dúo Camilo-Tomatito
El final del mes de agosto, con la bajada del telón del Mas i Mas Festival, de la profusión de festivales estivales en toda la geografía catalana y de algunos conciertos de primerísima magnitud en el capital catalana (Coldplay, Bruce Springsteen, Beyoncé) habitualmente es como la antesala de un mes de septiembre bastante rácano en lo que a llamativa música en vivo se refiere. Este año no es una excepción.
Las superestrellas internacionales del circuito se dejarán ver en la persona de Justin Bieber –que sigue siendo más carne de couché que de escenario– que el 22 de noviembre aterrizará en un escenario que ya conoce como es el del Palau Sant Jordi. Tras una triunfal gira por Norteamérica, el cantante estadounidense estará paseando por coliseos europeos las bonanzas de su último álbum Purpose, que incluye bombazos como What do you mean? y Sorry.
Quizás no con la misma dimensión mediática, pero será curioso comprobar la reacción del aficionado ante dos conciertos estilísticamente en las antípodas pero en idéntico recinto, el recurrente Palau Sant Jordi. Por una parte, el espectacular regreso durante dos noches consecutivas (1 y 2 octubre) de los gloriosos Red Hot Chili Peppers, que presentarán su muy reciente nuevo álbum The getaway, obra producida por Danger Mouse y que ha recibido críticas mixtas, sobre todo por una cierta indefinición estilística. Sin embargo, los directos de la banda liderada por Anthony Kiedis y Flea suelen ser imparables demostraciones de músculo y dominio escénico.
Dos semanas más tarde, el día 14, será una de las nuevas sensaciones de la escena pop vocal quien ocupará el escenario de Montjuïc, Fifth Harmony, un quinteto femenino creado a raíz del programa televisivo X Factor y que está presentando su álbum de estreno Reflection. Más allá de la oportunidad mercadotécnica, las prestaciones vocales y los solventes arreglos de sus canciones les han convertido en un auténtico fenómeno.
Donde sí que no habrá margen a la incógnita, al error o –en principio– a la sorpresa, será con la que se prevé memorable velada, también en el Sant Jordi, que protagonizarán The Cure el 26 de noviembre. Un concierto hecho público a finales del año pasado y que forma parte de la primera gran gira que están haciendo en Europa desde 2008 –bautizada The Cure 2016–, ya que en los últimos años solo ha actuado en festivales, incluido un inolvidable y maratoniano concierto en el Primavera Sound. La banda liderada por Robert Smith repasará los grandes éxitos que ha producido a lo largo sus cerca de 40 de carrera, combinándolos con rare-
zas de su discografía y algún corte inédito.
Viejos conocidos de la afición barcelonesa también son los Pixies, la vigorosa formación encabezada por Black Francis, que también se ha podido ver y disfrutar en algún Primavera Sound muy reciente. Cuando aparezcan ne el escenario del Sant Jordi Club el 20 de noviembre, el motivo de su gira europea habrá salido al mercado a finales de septiembre, un álbum titulado Head carrier donde ha entrado aire fresco y les puede acercar a nuevos auditorios.
Pero más legendaria, cuando menos en términos de calendario, es King Crimson, una banda de formación muy cambiante y de transformaciones nominales no exentas de polémica. La banda que ocupará el amplísimo escenario del Auditori del Fòrum también durante dos noches consecutivas (24 y 25 de noviembre) sigue liderado por el guitarrista y compositor Robert Fripp, es decir, lo sigue estando desde que la fundó él a finales de los sesenta, convirtiéndola desde el primer en referente del rock progresivo. Ausentes de los escenarios españoles desde el año 2000, la formación. De aquel entonces a la actualidad, no queda nadie en su formación excepto él, ya que de hecho se trata de su octava reencarnación, en donde destaca la presencia de tres baterías.
Los festivales de Jazz y del Mil·lenni ya se habrán puesto en marcha en los dos próximos meses. Del segundo poco se sabe, pero mientras los Ocean Colour Scene son uno maduros siempre interesantes (1 diciembre en Apolo), el cantante británico Michael Kiwanuka, es uno de los nombres del momento y vendrá a presentar su reciente disco Love & Hate.
Del Festival de Jazz la oferta es amplia y generosa en puntos de interés, pero a bote pronto hay dos referencias que parecen incuestionables: el regreso del mágico dúo formado por Michel Camilo y Tomatito, que vendrán a estrenar en el Palau de la Música su nuevo disco, de aparición inminente, Spain forever, con el que cierran su glorioso trilogía (18 noviembre). Y el otro nombre propio incuestionable es el de Michel Legrand, el músico y pianista francés que ha pasado a los anales musicales por la autoría de bandas sonoras de películas como La vie en rose, Bajo el cielo de París o Yentl.
De la escena nacional y local no faltarán los nombres, comenzando por el cuarteto invencible que forman Víctor Manuel, Ana Belén, Miguel Ríos y Joan Manuel Serrat, que después de recorrer el circuito estival se presentarán en el Palau Sant Jordi con su espectáculo El gusto es nuestro (13 octubre). En idéntico marco regresarán los Estopa dos días más tarde, para despedir su gira de Rumba a lo desconocido, que ya presentaron allí el noviembre del pasado año.
Del resto de la oferta hay otra cita ineludible en la velada que anuncia emociones intensas, o sea, la que ofrecerá el cantante inglés Benjamin Clementine en el Palau de la Música (22 noviembre), donde presentará las composiciones de su álbum At least for now, dichas con una voz que no solo conmueve sino que ya tildan de magistral.