Los sondeos prevén que las mujeres darán la puntilla al magnate
res del partido cerraran filas y apoyaran incondicionalmente al candidato. El sondeo de Politico revelaba que el 74% de los republicanos exige fidelidad al candidato, pese a sus extravagancias, mientras que sólo un 13% de las mujeres republicanas defendían su retirada. La CBS encargó una encuesta electoral la semana pasada en estados clave como Ohio y Pensilvania, pero después del escándalo rehizo el sondeo con las mismas personas y más del 80% habían visto, oído o leído el contenido de la cinta. Algo más de la mitad en ambos estados respondió que no habían cambiado su opinión sobre Trump, pero el 44% en Ohio y el 47 % en Pensilvania dijeron que su opinión sobre el candidato republicano había empeorado. Y entre los que decían esto, había muchas más mujeres que hombres. El resultado de estos sondeos puede leerse de manera equívoca. Para Donald Trump, que sólo el 74% de sus correligionarios no deseen su retirada, lejos de ser un triunfo es el anuncio de una derrota segura. Si el 13% de mujeres republicanas deja de votarle, como parece aventurar el sondeo de político, la derrota del candidato republicano será histórica.
En los días previos al escándalo, los sondeos que ya reflejaban el impacto del primer debate registraban una evolución considerablemente favorable a Hillary Clinton. Hasta el punto que ahora la candidata demócrata vuelve a ser favorita en Ohio, un estado que su mismo jefe de campaña había dado por perdido. Si a ello se añade que el gobernador
Clinton ya supera a su rival en Ohio, el estado que los demócratas daban por perdido
John Kasich, que es republicano, ha condenado a Trump y le ha negado el apoyo, es posible que cumpla el pronóstico más optimista pero en el que menos creían los estrategas demócratas. “Si Trump no gana en Ohio, no hara falta esperar más resultados”.
Expertos en estadística electoral consideraban hasta ahora que una eventual victoria de Donald Trump era posible porque la ventaja de Clinton cabía dentro del margen de error de los sondeos. Es decir, que un mínimo movimiento en el estado de opinión podría dar una victoria por la mínima al candidato republicano. Sin embargo, ahora Clinton se aleja por encima del margen de error, mientras su rival sólo puede actuar a la defensiva. El portal Fivethirtyeight da a Clinton el 81,3% de posibilidades de ganar, y el New York Times el 83%.
Así que con menos del 20% de posibilidades de victoria, Donald Trump actúa con más moral que al Alcoyano, como se vio el fin de semana, cuando centenares de personas se concentraron para protestar ante la Trump tower de Nueva York, en la Quinta avenida. El candidato recibió un sonoro abucheo al entrar en el edificio, pero Trump saludó como si fuera una delegación de su club de fans.