Sabadell se sube a la bici
La capital vallesana construirá 2 kilómetros segregados de ciclovía en la ronda Ponent y la rambla Ibèria
El Ayuntamiento de Sabadell ha decidido apostar firmemente por “pacificar” el tráfico en la ciudad, sobre todo en las zonas centro y norte, con la creación de “ejes cívicos”. El concejal de Espacio Público, Xavi Guerrero, ha anunciado que en el primer trimestre del 2017 se habilitarán dos kilómetros de carriles bici segregados en la ronda Ponent y en la nueva rambla Ibèria. En el tramo entre la plaza de Catalunya y la carretera de Terrassa se suprimirán las actuales ciclovías sobre la acera de la ronda Ponent y se bajarán a la calzada, con lo que esta arteria de la ciudad pasará de tres carriles para coches en ambos sentidos a solo dos. En lo que resta de mandato el objetivo es ampliar en 9 km la red de carriles bici.
Cuando se acaben las obras del “metro de Sabadell” (la prolongación de los FGC con cinco estaciones), en primavera, la Generalitat deberá haber urbanizado el exterior de la nueva estación subterránea de Can Feu-Gràcia. La fisonomía de la rambla Ibèria, cerrada por las obras de FGC, cambiará radicalmente ya que no pasará por debajo de la vía del tren como hasta ahora y se convertirá en la continuación de la ronda Ponent. “Dejará de ser una vía rápida de acceso a la autopista C-58 para ser una calle integrada en la trama urbana, con la continuación del carril bici de ronda Ponent y con aceras amplias que inviten a pasear”, destaca el concejal de Espacio Público. “Vamos a estudiar –añade– la posibilidad de cortar la nueva rambla Ibèria los domingos para que sea un espacio de disfrute para los vecinos”.
Además, se construirá una rotonda elevada en el cruce entre la ronda Ponent, la carretera de Terrassa y la rambla Ibèria, valorada en 640.000 euros. En este tramo, el carril bici volverá a pasar por encima de la acera para garantizar la seguridad a los ciclistas. La urbanización del carril bici de Ponent costará 210.000 euros.
“La ciudad no es para los coches que invaden el espacio, sino para las personas –subraya Guerrero–. Apostamos primero por los peatones, después por la bici, seguida del transporte público y en último lugar, el vehículo privado”. Según el edil, la orografía de Sabadell, una ciudad plana, favorece esta apuesta por la bici. En la actualidad, cuenta con 31,7 km. de carriles bicis urbanos bidireccionales y con 20,9 km. de una única dirección, además de 65 km. de carriles interurbanos, con muchos usuarios a lo largo del río Ripoll. El equipo de gobierno está revisando el plan director de la bicicleta porque hay carriles que, como recuerda el concejal, “finalizan en una marquesina o en unas escaleras que bajan a la Gran Via”.
La movilidad del barrio Centre-Creueta cambiará a favor del peatón, inspirándose en las supermanzanas de Barcelona. El gobierno local destinará dos tramos de calles para el paseo: Vapor (entre Manaut y Salut) y Llobet (entre Paus y Salut) y cambiará el sentido de otras. “Se trata de evitar que los coches cojan atajos por estas callejuelas para llegar antes a vías de circulación mayores. Cuando entres con el coche en estas calles, saldrás expulsado”, señala Xavi Guerrero. La escuela Enric Casassas recuperará la calle para hacer actividades lectivas.
La supermanzana de Barcelona inspira varias actuaciones encaminadas a dar prioridad al peatón