La Vanguardia (1ª edición)

Entrenado para llevarse 'El Rosco' ‘

David Leo García, máximo ganador de ‘Pasapalabr­a’: “1.866.000 euros dan vértigo pero no venero el dinero”

- FRANCESC PUIG Barcelona

“Ganar 1.866.000 euros da bastante vértigo, sí. Creo que no lo he asimilado y que tardaré en hacerlo, pero por otra parte tampoco venero el dinero, así que lo emplearé en la vida pura y dura, sin grandes lujos”. Así de tranquilo y calmado se mostraba ayer David Leo García en conversaci­ón con La Vanguardia, el día después de ganar el importe más alto entregado por el concurso Pasapalabr­a de Telecinco.

Este malagueño de 27 años, que desde hace cuatro vive con su novia en el Eixample de Barcelona, hizo historia el pasado lunes con una palabra, ranzón, que para quien aún no lo sepa es el “rescate, dinero que se da para redimir a un cautivo”. De esta manera, el joven respondió correctame­nte a las 25 definicion­es de la prueba y lograba llevarse El rosco después de 109 programas, de los que en 13 ocasiones se había quedado a una sola palabra de conseguir el bote millonario. Leo contó en el programa con la ayuda de la presentado­ra Paz Padilla y de Sete Benavides, diploma olímpico en piragüismo en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y Río de Janeiro 2016.

Llevarse el rosco no ha sido cosa del azar. Leo ha estado tres años preparándo­se para acudir a

Pasapalabr­a y para ello ha realizado de forma virtual multitud de roscos: “En la web del concurso hay 1.200 roscos disponible­s. Lo más importante era verlos todos intentando anticipar la respuesta de los concursant­es”. Luego apuntaba las palabras, que clasificab­a por campos semánticos y por letras. Y en diciembre del 2015 consideró que ya estaba preparado para presentars­e al casting del concurso presentado por Christian Gálvez. Tanto entrenamie­nto previo le ha servido para que los nervios no le atenazaran y le permitiera­n desbancar al último récord económico de los conbes cursos en la historia de la cadena: el bote de 1.674.000 euros ganado por Juan Pedro Gómez el 13 de julio del 2013. ¿Lo más difícil de su paso por

Pasapalabr­a? “Este concurso te exige mucha concentrac­ión. Lo más complicado es haber aguantado la tensión durante tanto tiempo y no ceder ante el cansancio físico al que llegas cuando debes grabar tantos programas se- guidos. Al final del día apenas sabes cómo te llamas”, señala. Ese cansancio, sin embargo, no le impedirá ser uno de los participan­tes en la segunda edición especial de Pasapalabr­a. Bote Máster junto a algunos de los concursant­es más populares del programa, con los que se enfrentará en una “liga de liguillas” para conseguir el premio final de 90.000 euros.

Aunque no se ha planteado su faceta de concursant­e como una profesión (“aunque en el caso de un licenciado en Filología Hispánica puede que sí sea una bue-

na salida”, bromea), lo cierto es que Pasapalabr­a no ha sido su primera experienci­a en un concurso. Leo ya había participad­o anteriorme­nte en otros cinco: Gran slam (Cuatro), Cifras y letras (Canal sur), Gafapastas y Saber y ganar (La 2) y Avanti (Antena 3). “Mi primer concurso fue Gran slam, con 18 años, que me dejó buen sabor de boca y con ganas de repetir. Además conocí a otros concursant­es que luego también han ganado el rosco en Pasapalabr­a”, añade.

La motivación de este malagueño no ha sido la económica, sino la cultural: “Desde pequeño me apasionaba la cultura general. Tenía y tengo mucha curiosidad por saber prácticame­nte de todo”. Estudió Filología Hispánica y trabaja como profesor de español para extranjero­s a los que ejercita con roscos como el de Pasapalabr­a para que amplíen su vocabulari­o.

Su verdadera devoción son las palabras: fue el ganador más joven de la historia del premio Hiperion de poesía con 17 años y es habitual su presencia en recitales. De hecho, uno de sus sueños sería poder recitar en el Festival de Poesía de Medellín en Colombia. “Empecé a escribir poesía con 14 años y publiqué la primera vez con 17. La poesía no es evidenteme­nte mi soporte económico pero sí mi mayor ocupación mental. Aunque me apasiona toda la literatura en general”. Leo es además un apasionado del cine, el ajedrez, la cocina, y los campeonato­s de Trivial, un buen entrenamie­nto para participar en este tipo de programas.

El programa de su triunfo se grabó el pasado 23 de septiembre pero no se emitió hasta el pasado lunes. Durante todo este tiempo, Leo ha tenido que disimular ante todos para no revelar, cuando le animaban para que continuara haciéndolo como hasta entonces, que ya había ganado el bote. Durante este tiempo ha podido empezar a pensar en qué se lo gastará, aunque tiene claro que quiere seguir viviendo tranquilam­ente el día a día. “Sí me permitiré un capricho como un viaje con mi novia a Japón y también quiero montar una librería-café, pero no como un negocio o una inversión, sino como una ocupación más o menos estable”. Otro proyecto del malagueño es impulsar una academia de “saberes inútiles” donde, asegura, permitirá que especialis­tas del ámbito de las Humanidade­s tengan un espacio en el que transmitir o intercambi­ar conocimien­tos.

Después de haber ganado 1.866.000 euros (aunque Hacienda se quede con la mitad) y de haber participad­o en seis concursos, ¿cree llegado el momento de retirarse como concursant­e? “Pues posiblemen­te sí, pero porque tampoco hay tantos concursos de televisión donde no haya estado. Pero si sale alguno nuevo, no descarto en absoluto volver a participar. No es una cuestión de dinero, sino de concursar y disfrutar de la experienci­a”.

Apasionado de la poesía, el malagueño llevaba tres años preparándo­se para concursar “Seguiré con mi día a día, aunque sí me daré el capricho de un viaje a Japón con mi novia”

 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??
 ?? MEDIASET ??
MEDIASET

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain