Los ríos de Babilonia
Se desconoce aún el grado de destrucción del sitio arqueológico, de 3.400 años
El ejército iraquí reconquista Nimrod y el sitio arqueológico a un kilómetro al este de la ciudad, de 3.400 años de antigüedad y considerado una cuna de la civilización.
El ejército iraquí reconquistó ayer Nimrod y el sitio arqueológico a un kilómetro al este de la ciudad, de 3.400 años de antigüedad y considerado una cuna de la civilización. El comunicado oficial del ejército fue sumamente escueto, informando tan solo de que “Tropas de la Novena División Blindada liberaron completamente la ciudad de Nimrod e izaron la bandera iraquí en sus edificios”. Dos horas después se informaba de la entrada de los soldados en el sitio arqueológico pero sin dar detalles del estado en que se encuentra.
Nimrod fue una de las capitales (cuyo nombre original era Kalhu) del imperio asirio, que llegó a extenderse desde Egipto a las actuales Irán y Turquía. En marzo del 2015, el Estado Islámico (EI) difundió imágenes de cómo sus hombres se ensañaban con el sitio arqueológico –declarado patrimonio de la humanidad por la Unesco– a base de excavadoras, explosivos, taladros y martillos, así como imágenes del saqueo y aparente destrucción de piezas del museo de Mosul.
Todo esto había ocurrido ya un mes antes, y entonces representantes políticos iraquíes reprocharon a la coalición internacional contra el Estado Islámico que no lo hubiera impedido con bombardeos aéreos. Nimrod ya fue saqueada y dañada tras la invasión estadounidense del 2003.
Las autoridades iraquíes afirmaron que los restos la antigua Nimrod había sido completamente arrasados por el Estado Islámico, pero imágenes por satélite suministradas a la Unesco parecían indicar que no se había llegado a ese extremo pero tampoco servían para evaluar su grado de destrucción.
La expulsión del Estado Islámico de Nimrod carece de valor estratégico en la campaña de Mosul, y su reconquista constituye un elemento más en el cerco a la ciudad –que se encuentra a unos 30 kilómetros al norte– por el flanco sudeste. Mientras las fuerzas especiales combaten en los barrios del este de Mosul, las unidades militares al sur aún tienen bastante territorio por recorrer. En este sector, el próximo objetivo anunciado es el aeropuerto de Mosul, a unos 11 kilómetros. Las pistas del aeródromo fueron semidestruidas y sembradas de obstáculos hace tiempo por los yihadistas para inutilizarlas.
Este aeropuerto se halla en la ribera occidental del río Tigris, que divide la ciudad, y tomarlo daría acceso al ejército iraquí al sector
La toma de Nimrod, sin valor estratégico, forma parte del cerco de Mosul para avanzar hacia su aeropuerto
oeste de Mosul, que corresponde a la ciudad vieja y donde se ha atrincherado el grueso de las fuerzas del EI. Se cree que miles de familias han sido secuestradas y trasladadas allí para servir como escudos humanos.
El número de desplazados en cuatro semanas de campaña militar alcanza ya las 54.000 personas. El Consejo de Refugiados Noruego, activo en Irak, dijo ayer que decenas de miles de personas “carecen de acceso al agua, alimentos, electricidad y servicios básicos de salud”. Pronto se alcanzará la cifra de 70.000 personas necesitadas de alojamiento, alimentos y asistencia médica.