El independentismo se moviliza para apoyar a los cargos electos investigados
80.000 personas se reúnen en Barcelona y denuncian “el aumento de la acción judicial”
Corresponde a cada cual juzgar si las 80.000 personas congregadas ayer –según la Guardia Urbana– ante las fuentes de Montjuïc para denunciar la judicialización de la política son muchas o pocas, pero lo que es innegable es que entre los cargos electos investigados por la justicia española y los representantes de las fuerzas soberanistas hay sintonía. Un pequeño detalle: justo antes de atender a los periodistas la exconsellera Irene Rigau, imputada por el 9-N, se dirigió al concejal de Vic de la CUP investigado por la Audiencia Nacional para incitar a la sedición con un “¡Coma! ¡Otra vez aquí! ¡Pronto seremos pareja de hecho!”.
Hubo más. En el acto organizado por la Assemblea Nacional Catalana (ANC), Òmnium Cultural y la Associació de Municipis per la Independència (AMI) se pudo ver a Joana Ortega y Francesc Homs aguantando micrófonos de medios de comunicación mientras hablaba Artur Mas; o David Fernàndez y Lluís Llach agarrados por los hombros mientras sonaba Els Segadors. Las muestras de afecto entre unos y otros fueron notorias. Además, para mostrar igualmente su apoyo, también acudieron representantes de los comunes, como Lluís Rabell, jefe de filas de Catalunya Sí que es Pot, o los tenientes de alcalde de Barcelona Gerardo Pisarello y Jaume Asens.
Según la AMI, hasta hoy se han abierto 407 causas contra 259 ayuntamientos catalanes. Con todo, los organizadores llenaron la avenida Maria Cristina para denunciar al Estado y a la justicia al grito de “Fuera, fuera, fuera, la justicia espa- ñola” y reclamar la independencia. Los organizadores aseguraron que la movilización había superado sus expectativas con el cierre parcial del tráfico de vehículos en la plaza Espanya, en la cola de la concentración. Tanto es así que el presidente de la ANC, Jordi Sànchez, celebró este hecho y clamó socarronamente que “¡podemos decir orgullosos que hoy hemos superado a España!”.
Con el lema “Por la democracia. Defendamos nuestras instituciones”, la movilización duró una hora. Hubo multitud de estelades, música y parlamentos. Así, Jordi Cuixart, presidente de Òmnium, exigió a las fuerzas políticas soberanistas que mantengan el “sentido de Estado y la generosidad para alcanzar la república catalana”, y anunció que “empieza la hora de la movilización permanente” ante el incremento de la acción judicial.
En una línea similar se expresó la presidenta de la AMI, Neus Lloveras, que interpretó este incremento como un signo evidente de que “se está acercando la recta final” del proceso independentista.
ANTE LA ESCALADA JUDICIAL Cuixart (Òmnium) avisa que “ha llegado la hora de la movilización permanente” CONSIGNAS Los encausados recibieron apoyo al grito de “¡fuera, fuera, fuera la justicia!”
Con anterioridad se expresó ante los periodistas el expresidente de la Generalitat Artur Mas, que consideró que los cuatro investigados por el 9-N no han desobedecido, sino que han obedecido “el mandato de la gente y las leyes que salen del Parlamento”. “Nos dejaremos la piel al servicio del país, de la libertad, del progreso y del bienestar”, añadió.
Por su parte, el exconseller Francesc Homs dedicó la manifestación “al señor Rajoy y a aquella gente de la política española que considera que la democracia es un muro y no una salida”. Y Carme Forcadell, presidenta del Parlament, descartó que la inhabiliten, porque “en democracia quien saca y pone presidentes son los diputados”.
Los cuperos Joan Coma y Montse Venturós también dijeron la suya. El primero aseguró que lo más lógico sería que su caso fuera archivado, “pero como no estamos dentro de parámetros democráticos, intuimos que tarde o temprano el juez determinará mi detención”. Venturós defendió otra vez la desobediencia como medio para alcanzar la autodeterminación.
Para apoyar a los cargos electos encausados, también asistieron a la concentración Oriol Junqueras y Marta Rovira (ERC), Albert Botran (CUP), la expresidenta del Parlament Núria de Gispert y los coordinadores generales del PDECat Marta Pascal y David Bonvehí, entre muchos otros.