De la pasarela a la calle, el chándal ya es tendencia
El binomio de chándal y tacones se llama ‘athleisure’ y marca el ritmo de la calle y la pasarela
El chándal con tacones (que Martirio popularizó cantando con el estribillo de “arreglá pero informal”) puede ser para algunos la peor pesadilla estilística. Pero para otros, y sobre todo para las celebridades y los que suelen dictar tendencia en el terreno de la moda, es ahora mismo una de las opciones más adecuadas para marcar estilo.
Una de las principales responsables de esta exaltación del
chandalismo, o esta fiebre por llevar las piezas de deporte en el día a día sin ningún tipo de pudor, es Kate Young. Se trata de una de las estilistas más aplaudidas de Hollywood, con clientas como Dakota Johnson o Emilia Clarke, que recientemente también ha cogido las riendas del estilo de Selena Gómez.
La aparición de la cantante con la sudadera y pantalón de chándal rojos de Vetements (1.300 euros es lo que vale este conjunto de la marca de looks agresivos que enloquece a las jóvenes de buena familia), combinado con unas sandalias blancas de Jimmy Choo ha sido una de las apuestas por el chandalismo más comentadas recientemente. Pero ni es la primera ni será la última.
La masificación de las prendas deportivas que tuvo en Madonna a una de sus más fieles promotoras hace ahora casi diez años, se transforma ahora en una fiebre deportiva “de luxe” que arrasa en el armario de las celebridades. Desde veteranos como Elton John y talentos más recientes como Justin Timberlake, a modelos de la talla de Gigi Hadid o provocadoras natas como Rihanna o Rita Ora se apuntan a esta moda del chándal... con zapatos de vestir o tacones y complementos que hasta hace poco parecían los peores acompañantes del estilo deportivo.
Eso sí, cada uno lo lleva a su manera. Jennifer López es capaz de un total look de rojo en el que no falta el Birkin de cocodrilo a tono y el rapero Tinie Tempah llega a combinar el chándal con un abrigo de piel de Burberry hasta la rodilla. Pero esta ¿revolución? estilística va aún más allá. Porque la locura deportiva se ha subido a las pasarelas del mundo desde hace varias temporadas. Primero fue la irrupción de las zapatillas deportivas (sneakers, las llaman) y las sudaderas combinadas con faldas o pantalones sofisticados, casi de sastre. Y todo fue a más hasta que en las colecciones de primavera-verano de este año que acaba abundaron las colecciones plagadas de guiños chandaleros. Coincidía con el año olímpico y desde el citado Vetements, hasta Chloé, Lacoste, Paco Rabanne, Ralph Lauren, Gucci (que convierte el chándal de toda la vida en un look de lujo gracias a aplicaciones de pelo, grandes lazadas, bordados y telas brillantes) o Elie Saab hicieron (y siguen con ello en las nuevas colecciones) sus apuestas atléticas.
La estética ha calado tanto que ha llegado incluso a palacio: en una de sus apariciones más recientes, la reina Letizia sorprendió (al menos a quienes no están atentos a las tendencias) con un