PDECat, la convergencia para un país mejor
Hoy hace 42 años nacía Convergència Democràtica de Catalunya. La formación que bajo el liderazgo de Jordi Pujol se convirtió en el partido central de la política catalana, con el objetivo de reconstruir el país y alcanzar su reconocimiento nacional. El pasado julio, la mejor CDC fue la semilla de una nueva formación política, el Partit Demòcrata.
Ahora, nuestro país vive una etapa de transición nacional. Nuestra voluntad de encuentro con Europa es intensa a la vez que nuestra divergencia con España es cada vez más evidente. El Estado español nos niega las prácticas democráticas más elementales, mientras que los catalanes no renunciaremos nunca a poder celebrar un referéndum a la escocesa.
La sociedad afronta un cambio de ciclo histórico y de gran envergadura. La ciudadanía pide respuestas para afrontar una globalización que va por delante de su propia gobernanza. Por eso, reivindicando el buen capital político que nos ha traído hasta aquí, el Partit Demòcrata nace para dar respuestas a los nuevos tiempos que despuntan, y lo queremos hacer sin apriorismos y demagogia. Sin estridencias pero con toda la convicción. Con seguridad jurídica
M. PASCAL I CAPDEVILA, y fieles al mandato del 27 de septiembre.
La tentación del repliegue está bien presente y el Brexit ha sido la lección más chocante. Los populismos de izquierdas y de derechas afloran, y la defensa de nuestra democracia pide precisamente más razón democrática, voluntad transformadora real, transparencia y gobernanza. No hay que compartir las propuestas populistas para entender el malestar social. El descrédito de algunas instituciones y la desconfianza hacia la política se hace evidente desde el momento que, por ejemplo, la crisis financiera y bancaria no ha tenido consecuencias inmediatas para los responsables de los fallos en los organismos de control o los ejecutivos negligentes.
El Partit Demòcrata representa la convergencia de todas las ideas que defienden la libertad individual, la prosperidad colectiva y la justicia social. Un partido que, desde el centro amplio y el soberanismo, defiende las libertades individuales, la economía de mercado, los autónomos y las pequeñas y medianas empresas. Que cree en la promoción de la responsabilidad y la iniciativa, la cultura del esfuerzo, una política redistributiva, un sistema educativo de éxito, una sanidad universal y de calidad y un Estado de bienestar centrado en la calidad de sus servicios y no en quien los presta.
Un partido que apuesta por la economía circular y las energías renovables, una sociedad que dé respuesta a los flujos migratorios, defienda sin complejos los derechos humanos, un posicionamiento comprensivo y no superficial de la política internacional o la necesidad de garantizar unas pensiones y salarios dignos, así como segundas oportunidades para aquellos que las necesiten. Y sí, un partido que cree en la seguridad como la primera de las libertades.
El Partit Demòcrata es la expresión de un espacio vivo y en crecimiento al servicio de un gran país. En pocos meses se han asociado 12.000 personas sin ningún traspaso automático de militancia, un 20% de las cuales nunca militaron en Convergència. En estos meses decisivos, mucha gente convergiremos en este nuevo proyecto central en la política catalana, que encarna las ambiciones de un país nuevo y mejor, profundamente democrático y que queremos libre, moderno y justo.