Victoria de juego y de actitud
Gerard Moreno vuelve a ver puerta tras fallar un penalti y rompe el gafe españolista en Mendizorrotza
La primera victoria liguera del Espanyol en Mendizorrotza llegó en el momento más oportuno y de la mejor manera. En el partido más atrevido de Quique Sánchez Flores, su equipo supo llevarse el gato al agua jugando, sufriendo y sabiendo aprovechar su momento. José Antonio Reyes firmó su mejor partido como blanquiazul y Gerard elevó su cuenta goleadora a cinco tantos después de fallar un penalti, el primero que le pitan a favor al Espanyol esta campaña. Ahora, la cuenta pendiente es ganar también en Cornellà.
Forzado por las bajas por lesión de dos de sus puntas, Baptistão y Álvaro Vázquez, y por una de las piezas fundamentales de su centro del campo, Marc Roca, el técnico blanquiazul no hizo los relevos obligados sin intención y decidió dar un paso adelante para plantear un once inicial en el que jugaban Jurado junto a Fuego y Reyes junto a Gerard para que Caicedo esperase su turno en el banquillo. Una clara apuesta por la elaboración que contrastaba con la apuesta por el robo y la contra por velocidad a la que había acostumbrado el Espanyol a su afición, especialmente en sus partidos fuera de casa.
También decidió Pellegrino dar un paso adelante y tras su victoria en El Sadar y la lesión de Laguardia, su referente en el eje de la defensa, no sólo consolidó una defensa convencional de cuatro, sino que dispuso un atrevido 4-3-3 con Marcos Llorente de mediocentro y Deyverson en punta para sorpresa de la grada de Mendizorrotza, que a duras penas pudo mantener la huelga de animación que había convocado hasta el minuto 13.
Dos atractivas propuestas que transformaron enseguida lo que podía haberse convertido en un duelo del patadón, el robo y la carrera en un partido de poder a poder en la elaboración y en las llegadas al área rival con el balón jugado. Recurriendo en exceso a las bandas el Alavés y triangulando en la frontal el Espanyol con la mejor versión de Reyes y un gran trabajo en el juego interior de Piatti, que cedió la línea de banda a Aarón.
El partido pintaba bien, aunque las ocasiones escaseaban. En parte por los errores en esos centros y últimos pases, de los que el Espanyol llegó a abusar, en parte por la solvencia defensiva que mostraron ambos equipos. Jurado avisó ya en el 11 con un disparo a puerta que Pacheco envió a córner tras una buena acción de Piatti y Camarasa replicó con un remate en tijera que no sorprendió a Diego López en el 24. El meta españolista también estuvo al quite cuando en la siguiente acción de ataque de los locales Deyverson consiguió cabecear picado un centro de Femenía.
La más clara de ese primer periodo, sin embargo, llegó a balón parado y fue para el Espanyol. Reyes estrelló en la escuadra derecha de la meta alavesista un libre directo que botó desde el semicírculo del área en el 29. El gol habría sido el mejor premio para un jugador que a su calidad sumó una gran capacidad de sacrificio.
El primer acto acabó sin más ocasiones y en el segundo la especulación fue ganando terreno al atrevimiento en un partido que ya se jugó más en la zona ancha que en las áreas. Deyverson volvió a tener el gol en el 55 al cabecear otro centro, esta vez de Llorente, pero el remate salió desviado.
Viendo que su equipo no funcionaba como en el primer tiempo y que Reyes estaba fundido, Sánchez Flores no dudó en mover el banquillo para hacer debutar a Melendo –el tercer debut del técnico–, adelantando a su vez a Jurado y ubicando a Diop junto a Fuego. A esas alturas el Alavés ya lo había dado todo y era el momento del Espanyol, que se volcó en el área alavesista. Se encontró con un penalti por manos de Alexis dentro de su área, pero Gerard no consiguió engañar a Pacheco, que despejó (80). Pero el canterano tuvo su revancha y cuando el delegado españolista ya había anunciado su sustitución por Caicedo al cuarto árbitro, Gerard se escabulló de su marcador en un córner botado por Piatti para cabecear el balón a las redes en el 81 y dar la victoria a su equipo.
EL ESFUERZO Ejerciendo de segundo ariete, Reyes mostró su mejor versión y sumó sacrificio a su calidad EL ESTRENO Jurado fue el encargado de subir balones y Melendo se convirtió en el tercer debutante de Quique