Carlsen vuelve a ser favorito
El campeón tendrá las blancas en tres de las últimas cinco partidas
Kariakin jugó pobremente la apertura y desde la jugada once ya iba a remolque en busca de las tablas. Por su parte, Carlsen se quitó de encima otras piezas negras y afrontará las cinco partidas restantes disfrutando tres veces de las blancas. Ese es el análisis superficial, pero además, esta corta partida dejó entrever algunos detalles importantes. Primero: la preparación teórica de Kariakin con blancas deja bastante que desear, mientras que Carlsen se muestra hasta ahora muy seguro con las piezas negras. Segundo: el ruso reacciona con extrema prudencia ante cualquier situación imprevista, demostrando un enorme respeto e incluso temor a su poderoso rival. Es más, el ruso no explota los factores psicológicos: debía haber seguido jugando con peón de más, presionando al rival. Pudiera parecer que el aspirante sería feliz firmando siempre tablas. Tercero: Carlsen no está muy concentrado, no se le ha visto cómodo en todo el encuentro, y parece que le fastidia la estrategia rival de no dejar jugar. Lo cierto es que sólo quedan cinco partidas y Carlsen, con tres blancas, vuelve a ser favorito. Pero el noruego tendrá que emplearse a fondo y destapar el tarro de las esencias, para aprovechar alguna de las pequeñas ventajas que su rival –con demasiada reiteración y facilidad– le está concediendo. “Tanto ir el cántaro a la fuente...”
1.d4 d5 2.c4 c6 3. c3 f6 4.e3 a6 Hacía casi diez años que Magnus no empleaba esta jugada, así que debió ser una relativa sorpresa para Kariakin, que contestó con extrema cautela. 5. d3 Este movimiento no se considera muy preciso. El aspirante se desvía de su único precedente con esta variante en la que tras lo más habitual 5. f3b56.b3 g4continuóconla agresiva 7.a4 en Kariakin-Solak (Antalya, 2013) 5...dxc4 6. xc4 e6 7. f3 c5 8.0–0 b5 9. e2 b7 10.dxc5 Esta forma de jugar se considera ultrasólida, pues deja sobre el tablero una estructura de peones simétrica y dos columnas centrales abiertas en las que habitualmente se cambian pronto todas las piezas pesadas, con un resultado muy probable de tablas. 10... c6 Esto sorprendió a Kariakin, que invirtió nada menos que 18 minutos en su siguiente movimiento. 11. d2?! Influenciado por Krámnik contra Tomashevsky (Moscú 2012), Kariakin trata de copiarlo, pero este plan es ahora poco apropiado. 11... xc5 12. de4 xe4 13. xe4 e7 14.b3 b4! 15. f3
15...0–016. a3 c8?! Una jugada floja –efectuada tras una reflexión de más de ocho minutos– que permite a las blancas ganar una ligera ventaja, aunque pasando a un final de tablas casi ciertas. 17. f6+! xf6 18. xb7 xa1 19. xb4 f6! Conduce de modo forzado a un final con peón de menos pero alfiles de distinto color, que se puede sostener con cierta facilidad. 20. xf8 xd1 21. xd1 xf8 22. xa6 b4 El solitario peón negro neutraliza de forma estable a los dos peones blancos. Pero la presencia de torres garantiza todavía cierta lucha, aunque Kariakin no lo vio así. 23. c1 g6 24. c2 a8 25. d3
d8 26. e2 f8 27. f1 a8 28. c4 c8 29. e2 e7 30.f4 h6 31. f3 c7 32.g4 No se entiende que Kariakin no intentara seguir con 32.e4! Debe ser tablas, pero es agradable jugar con peón de más.
32...g5 33. e4 c8 Tablas.