Aznar rompe con Rajoy a las puertas del congreso del PP
El exjefe del gobierno abandona la presidencia de honor del partido La renuncia, que supone su salida de la ejecutiva, culmina años de conflictos La última discrepancia, a través de la FAES, fue por la ‘operación diálogo’
José María Aznar López vuelve a ser un simple militante de base, como cuando se afilió a Alianza Popular allá por 1977, en Logroño, partido al que ya pertenecía su mujer, Ana Botella. El expresidente del gobierno puso ayer punto final a una etapa de desencuentros con la dirección del PP con una carta dirigida a Mariano Rajoy, en la que le anuncia su decisión de renunciar a la presidencia de honor del PP.
Un anuncio que le hizo también por teléfono, ya que tras enviar la carta a la sede del PP, en la calle Génova de Madrid, le llamó por teléfono y mantuvo una conversación con Mariano Rajoy, que estaba en Nueva York, para explicarle las mismas razones que señala en la carta . Según fuentes próximas a Rajoy, la charla se desarrolló con normalidad y buen tono, y en ella Aznar le explicó los términos de su renuncia. Una decisión que Rajoy ha asumido con tranquilidad y normalidad.
A la hora de enumerar las razones de este su dimisión, Aznar no cita ningún tipo de desavenencia con Rajoy , su gobierno o el PP, en contra de lo que hizo la semana pasada, cuando criticó, a través de FAES, a la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, por su política de diálogo con Catalunya. Nada más hablar con Rajoy, Aznar colgó en su página web personal una copia de la carta.
En ella justifica una decisión tan drástica en la separación producida entre la FAES, que preside, y el PP, que hace que ningún miembro del patronato ocupe ya cargo alguno en el partido, mientras que antes, por ejemplo, el secretario general del PP era vicepresidente de la fundación.
Aznar recuerda, que “hace ya 5 años, en el último congreso nacional, los militantes del PP tuvieron la generosidad, una vez más, de elegirme su presidente de honor, lo cual fue para mi, como siempre, un orgullo”. Pero considera que “hoy, la nueva situación de la Fundación FAES, que desde su creación en Valladolid en 1989, siendo yo presidente de la Junta de Castilla y León, ha estado vinculada al Partido Popular; su independencia y, por consiguiente, su desvinculación del Partido Popular, aconseja, sinceramente, esta decisión”. El propio Aznar lo justifica en que “ningún patrono de FAES ocupa cargo alguno, ni tan siquiera honorífico, en ninguna formación política. Como presidente de FAES no deseo ser una excepción”.
Pero Aznar deja entrever en la carta que no es un mero formalismo, porque indica que esta decisión significa también “junto a otras consideraciones que alargarían innecesariamente estas líneas”, con las que parece hacer referencia a sus discrepancias sobre las políticas desarrolladas por el Gobierno y el partido, “mi no participación en el próximo congreso del PP. He participado en todos los congresos desde 1979. Será la primera vez que no lo haga, y, por lo tanto, quiero expresar mis mejores deseos de éxito en tan importante cita”.
Precisamente por ser presidente de honor, Aznar es miembro del comité ejecutivo del PP, y por lo tanto de la junta directiva nacional, lo que le hacía compromisario nato del Congreso. De hecho, ayer mismo, cuando el vicesecretario de organización, Fernando Martínez Maillo, presentó la ponencia de Estatutos, al ser preguntado por si Aznar sería invitado al Congreso, y si se le reservaba algún papel, o algún discurso, respondió que no hay que invitarle, puesto que como presiden- te de honor es miembro nato, y que su papel en el congreso debía decidirlo la presidenta del cónclave, Luisa Fernanda Rudi.
Tras conocer la decisión de Aznar, Maillo expresó a La Vanguardia su idea de proponer la eliminación de la figura del presidente de Honor que ahora figura en los estatutos, y que reserva a quienes habiendo ostentado la presidencia nacional del partido, hayan contribuido de forma determinante al fortalecimiento de nuestro proyecto”. Se trata de una elección que no es automática, sino que en cada congreso debe proponer el presidente nacional.
En la carta comunica a Rajoy que mantendrá su militancia en el PP, “después de haber sido durante ocho años presidente del Gobierno
Tras el anuncio de Aznar, el PP llevará en la ponencia la eliminación de este cargo honorífico Aznar asume que no participará en el Congreso del PP previsto para febrero El expresidente alaba a los militantes y se siente orgulloso de ser uno más entre ellos
de España, durante 14 presidente nacional del PP durante otros tantos su presidente de honor” y subraya: “No tengo palabras para expresar mi gratitud, reconocimiento y afecto a los militantes del PP por su dedicación, esfuerzo y servicio a españa y, particularmente, por su generosidad y lealtad hacia mi durante tantos año. Me siento muy orgulloso de ser uno más entre ellos”.
José María Aznar, que después de que Rajoy perdiera las elecciones del 2004 se convirtió en su mayor crítico, reanudó sus críticas cuando su heredero llegó al gobierno, por la subida de los impuestos. Durante estos años ha mantenido la tensión con él, hasta el punto de acudir a un comité ejecutivo, cosa que no hacía desde que había dejado de ser presidente, para expresar a Rajoy su disconformidad con la forma en la que gobernaba y llevaba el partido, y advertirle de que ya había perdido demasiadas elecciones como para seguir por el mismo camino, pero Rajoy hizo caso omiso.
En la carta, Rajoy se despide diciendo: “Aprovecho la ocasión para desearte los mejores aciertos en tu tarea en estos momentos tan importante y difíciles” y desearle “muy feliz Navidad y Año Nuevo”.