Antifrau pide a instituciones y partidos más contundencia
El 83% de los catalanes ven la corrupción como un problema grave
La Oficina Antifrau de Catalunya (OAC) reclama a los partidos políticos y a las instituciones más implicación y compromiso para luchar contra la corrupción. El nuevo director de la Oficina, Miguel Ángel Gimeno, lanzó este mensaje en la presentación de un estudio elaborado por este organismo que apunta que el 82,6% de los catalanes consideran que la corrupción en Catalunya es un “problema muy o bastante grave”, y el 74,2% cree que, actualmente, en la comunidad hay “mucha o bastante corrupción”. El 34,6% de los encuestados están convencidos de que en los últimos años la corrupción ha aumentado y el 36,1% que se ha mantenido.
Si bien es cierto que la percepción de la corrupción como un problema grave o bastante grave son inferiores a los del anterior estudio del 2014 –bajan unos seis puntos– estos avances son insuficientes para el director de la OAC, Miguel Ángel Gimeno, que huyó de hacer cualquier lectura triunfalista. “La percepción sigue siendo muy alta; sí, ha bajado, pero es que es muy alta”, insistió al aludir a un informe elaborado a partir de 850 encuestas que se realizaron el pasado mes de octubre.
De hecho, el nuevo responsable de Antifrau atribuyó el posible descenso al propio “cansancio” de la opinión pública: demasiados casos en los últimos años. También al hecho de que en los últimos meses los casos de los que más se ha hablado son de años anteriores o de piezas derivadas de estos. ¿Tiene que ver el trabajo de la propia administración en materia de transparencia? No lo descartó, pero a la vez insistió en que aún quedan muchas cosas por hacer.
En este sentido, Gimeno abundó en la necesidad de mejorar la transparencia de la financiación de los partidos políticos, señalando que las fundaciones “no pueden ser agujeros negros”. El responsable de la OAC confirmó que Antifrau prosigue con la investigación iniciada en época de su antecesor, el cesado Daniel de Alfonso, con el objetivo de arrojar claridad a la vinculación de esas fundaciones con las formaciones políticas. Un trabajo “complejo”, reconoció Gimeno, no exento de dificultades, pero a la vez esencial. Y es que en el propio informe se recoge que el 48,1% de los entrevistados consideran que los partidos políticos en Catalunya se financian ilegalmente, mientras que el 84% de los encuestados no tienen ninguna duda de que el hecho de que reciban financiación privada puede acabar influyendo en sus decisiones posteriores cuando están en el gobierno.
De ahí también que el informe reclame a las instituciones y a los partidos políticos que actúen de forma más contundente contra los casos de corrupción (el 82,5% de los encuestados no cree que hagan todo “lo que toca” para luchar contra ella). Y también que no fomenten el relato de normalización, justificación o resignación (el 14,6% de los encuestados aceptan que un alto cargo admita como regalo una caja de vino de una empresa, por ejemplo). Gimeno, como hizo la semana pasada en su comparecencia en el Parlament, insistió en la necesidad de contar con herramientas para asegurar “una protección integral” de quienes denuncian corruptelas.
Casi un 75% cree que en Catalunya hay “mucha o bastante corrupción”, y el 35%, que ha aumentado