La magia de ‘l’ou com balla’
Con la llegada del Corpus Christi, este histórico espacio del barrio Gótico acoge una de las tradiciones con más encanto: ‘l’ou com balla’
Durante años se extendió la creencia de que si durante la celebración del Corpus el huevo caía sería un mal año; por el contrario, si se mantenía en equilibrio, sería augurio de un buen año
La Casa Ardiaca es un edificio que sirvió como sede de la jerarquía eclesiástica de los arcedianos desde el siglo XII. En su patio, reconvertido hoy en un pequeño claustro, destaca su fuente, que cada año se viste con sus mejores galas para celebrar el Corpus Christi y l’ou com balla, que tal como indica su nombre, consiste en hacer bailar un huevo vacío encima del chorro de agua. El origen de esta tradición es incierto aunque parece que en el año 1440 ya existe constancia de su celebración cuando aparece anotada una partida de huevos entre los gastos para arreglar la capilla para la fiesta del Corpus. La teoría más extendida es que el huevo representa la hostia consagrada y el agua, el cáliz de la sangre de Cristo. Otra interpretación se refiere a la plenitud de la primavera representada en el huevo, el agua y las flores. Du- rante años se extendió la creencia de que si durante la fiesta el huevo caía sería un mal año, pero si se mantenía sería un buen augurio. La fuente no es la única sorpresa de la Casa Ardiaca, que desde 1921 alberga el Archivo Histórico de la Ciudad de Barcelona: en la planta baja se conserva una parte de la muralla romana.