“En la Rey Juan Carlos se pastelea todo”
Miguel Ángel Aparicio, catedrático de la UB plagiado
El profesor Miguel Ángel Aparicio ha presentado la demanda civil contra el rector de la Universidad Rey Juan Carlos, Fernando Suárez, que copió literalmente su obra El status del Poder judicial en el constitucionalismo español (1808-1936) en “al menos, 111 de 180 páginas”, según un peritaje profesional encargado por la Universidad de Barcelona (UB). Aparicio, catedrático de Derecho Constitucional, no es el único plagiado por Suárez pero sí el único que ha acudido a los tribunales para defender su trabajo intelectual. En la demanda no pide dinero sino que el rector declare fehacientemente que ha plagiado.
¿Cómo se enteró del plagio?
En septiembre, un catedrático de Historia del Derecho, que me pidió que no revelara el nombre, se encontró con dos textos idénticos al preparar un trabajo para su universidad. Vi que, efectivamente, el artículo de Suárez y un libro publicado junto a dos autores tenían páginas enteras, completas, sin cortes ni citas, del texto de mi libro.
¿Cómo reaccionó?
Me cabreé mucho. No me cabía en la cabeza tamaña usurpación de mi trabajo. ¡Qué gente tan indigna! No era razonable. Aunque de esta universidad, como de alguna otra, cabe esperar cualquier cosa porque está hecha a medida de los intereses de quien la creó.
¿A quién se refiere?
Me refiero al Partido Popular que está detrás de esto y que no respeta nada. Verá, en la tradición universitaria se partía del principio de buena fe y antes no se comprobaban los trabajos publicados porque era impensable que algo así ocurriera. Ahora se pastelea todo. Se hacen currículum vitae sumando méritos que se obtienen con publicaciones cuyo contenido no importa si es original. Y así, con toda impunidad, se llega a rector. Me dicen, y no sé si es cierto, que hay un circuito de autores que se plagian mutuamente con consentimiento. Y esto es muy grave para la universidad, una lacra que dinamita su credibilidad.
Pero se ha quedado solo en los tribunales a pesar de que el plagio parece afectar a otros profesores universitarios y de que mancha la reputación de toda la universidad española.
No exactamente. El resto de autores también se ha movido, ha firmado documentos de reprobación, exigiendo la dimisión del rector al Ministerio de Educación y a la Comunidad de Madrid que, como cabía esperar, han dicho que una eventual investigación no era de su competencia. Se lograron miles de firmas de la comunidad universitaria dentro y fuera de España. Pero no podemos hacer una demanda colectiva porque son plagios distintos y los otros autores plagiados, muchos historiadores, que no vienen del mundo jurídico, no quieren gastar dinero en el proceso judicial. Yo tuve el respaldo absoluto de la facultad de Derecho, de la que he sido dos veces decano, también del rectorado de la Universidad de Barcelona. Y mi abogado, Jaume Alonso-Cuevillas, se ofreció voluntariamente a defender mi causa. Otros no han tenido este apoyo.
¿Ha faltado más determinación por parte de la administración
y de la universidad?
Absolutamente. Para la comunidad universitaria es un acto de una desfachatez (y sin la des) sin precedentes. Que un rector consiga el cargo nutriéndose y medrando a través de los plagios significa que se quiebra el valor máximo en el que se asienta la universidad. Y eso empieza por la propia Rey Juan Carlos cuya dirección de gobierno ha cerrado filas en torno al rector. No se ha conseguido su cese, sólo que se adelanten las elecciones unos meses. Y resulta que, al parecer, se presentará su mano derecha... Es el colmo.
¿Y cómo explica la reacción del resto de la comunidad?
La Conferencia de Rectores (CRUE), al principio respondió tibiamente, como si no quisiera enterarse. Meses después lo suspendió como vocal... porque Suárez era vocal de la Conferencia. Y también es o era director de la revista de referencia en España Anuario de Historia del Derecho donde, antes de ser director, publicó un artículo plagiado. De verdad que es de un cinismo... Se van apoderando de todo. ¿Comprende la gravedad? Sin contrapeso. La universidad tiene un sentido corporativo muy fuerte. Cuando se produce un hecho de estas características los campus pasan de puntillas, como si no fuera con ellos. En fin, tampoco hay que irse muy lejos. Si yo tuve el respaldo de la UB no puedo decir lo mismo de la Universidad Autónoma de Barcelona, donde tengo muchos amigos, o de la Pompeu Fabra. Este comportamiento de no va conmigo pasa también en nuestra casa.
COMUNIDAD UNIVERSITARIA “Ante un hecho así, los campus pasan de puntillas, como si no fuera con ellos” EL PARTIDO POPULAR “El ministerio y la Comunidad de Madrid han dicho que no es de su competencia”
¿Qué pide en la demanda civil que ha presentado?
No quiero dinero, sólo pido que el rector de la Rey Juan Carlos redacte una sentencia declarativa de que ha plagiado. Con eso me basta.