Moda, cultura y modernidad en la gala de ‘Fashion & Arts’
Quienes han roto con el partido anuncian la formación de grupos parlamentarios
La política italiana está ofreciendo estos días un chocante espectáculo. Mientras la principal fuerza de centroizquierda –y base del actual Gobierno–, el Partido Demócrata (PD), se desangra en un conflicto interno, su líder, Matteo Renzi, está de viaje por California “para oxigenar el cerebro” y en busca de ideas para hacer frente al populismo en las próximas elecciones.
En el rifirrafe interno intervino ayer el ministro de Justicia, Andrea Orlando, que anunció su candidatura a la secretaría del partido en el próximo congreso. Orlando desafiará a Renzi y al otro aspirante al cargo, Michele Emiliano, presidente de la región sureña de Apulia.
Orlando, de 48 años, militante comunista en su juventud y que no posee ningún título universitario, no se refirió directamente a Renzi, pero hizo un duro comentario que podría tenerle como destinatario. “Presento mi candidatura porque no me resigno al hecho de que la política deba ser sólo prepotencia”, dijo. El ministro agregó que el PD “debe cambiar profundamente” para seguir siendo útil a los italianos.
El viaje de Renzi a la costa este de Estados Unidos ha provocado desconcierto y enfado entre sus correligionarios. Muchos no logran entender esa huida, ese desplante. Se sorprenden de que no optara por quedarse en Roma tratando de sanar heridas y de llegar a un compromiso para evitar la implosión del PD. Lo interpretan como la enésima prueba de su endiosamiento, de su arrogancia, de creer que él es el único en saber hacia dónde debe ir el partido. Quizás se confía demasiado y podría pagar cara esa actitud en las primarias por el liderazgo.
A través de su página en Facebook, Renzi explicó que está tratando de encontrar nuevas ideas en un territorio dinámico como Silicon Valley que le permitan encontrar respuestas al populismo. El expremier se entrevistó con el fundador de Tesla (coches eléctricos y proyectos aeroespaciales), Elon Musk, y el máximo responsable de Apple, Tim Cook, así como representantes de la amplia comunidad italiana que trabaja en la zona en el ámbito de las nuevas tecnologías y en la restauración. Renzi busca mimar su autoestima, se siente un incomprendido en su patria desde que perdió el referéndum sobre la reforma constitucional. Cree que sus compatriotas están demasiado tentados a aferrarse al pasado.
Quienes han decidido salir del PD por discrepancias irreconciliables con Renzi formarán ya hoy nuevos grupos parlamentarios en la
El ‘expremier’ viaja por California “para oxigenar el cerebro”, sin evitar la implosión del centroizquierda
Cámara de Diputados y en el Senado. A ellos se sumarán parlamentarios tránsfugas del grupo Izquierda, Ecología y Libertad (SEL).
Renzi quiere celebrar primarias en el PD en abril y que haya elecciones anticipadas en junio, un calendario al que se oponen sus contrincantes. En este escenario parece surrealista el empeño del Gobierno de Paolo Gentiloni en proyectar estabilidad, dentro y fuera de Italia, como si tuviera todo el tiempo del mundo para llevar adelante reformas y cumplir los ajustes financieros que le exige la UE. El voluntarioso Gentiloni se resiste a dar la impresión de que es un gobernante con próxima fecha de caducidad.