“‘La la Land’ es un musical naturalista”
Emma Stone, candidata al Oscar a la mejor actriz por el filme de Damien Chazelle, es una fan del género
Son varios los que creen que el Oscar a la mejor actriz que se entrega en la madrugada del domingo al lunes –hora española– debería ser para Isabelle Huppert o en su defecto, Natalie Portman, pero salvo que se produzca una de esas sorpresas que dejan a la audiencia boquiabierta, todo parece indicar que será Emma Stone la triunfadora.
En un año en que se han quedado afuera contendientes de mucho peso, como Amy Adams por su extraordinaria intepretación en La llegada, la nativa de Arizona de 28 años ha tenido mucho que ver en que La La Land se haya convertido en un extraordinario fenómeno que promete batir récords en la gala del Oscar de la misma forma en que lo hizo en la de los Globos de Oro. Sin duda ha sido su encanto y su carisma lo que ha ayudado a los espectadores a caer rendidos a los pies del musical de Damien Chazelle que celebra a Los Ángeles como ciudad y como punto de partida para conquistar el sueño americano.
Para Stone probar suerte en el género que hizo famosa a Ginger Rogers ha sido una vieja ambición, ya que de niña ya le fascinaban los musicales. “Mi madre era una gran fan de Los miserables, siempre ponía el disco y me explicaba de que trataba”, dice. “Luego la vi en el teatro cuando tendría unos 8 años y me quedé enamorada. Desde entonces me ha gustado mucho el musical como forma de arte, en donde te puedes ponerte a cantar para expresar un estado de ánimo”.
Para Stone el problema de un musical es “entender cómo manejar la delgada linea que tiene que haber en una interpretación donde parte de las emociones son transmitidas por los actores y otra parte por la canción”. Reconoce la actriz que adora a Judy Garland, a Rogers y a Catherine Deneuve por Los paraguas de Cherburgo, pero no siente que haya una gran conexión entre su filme y los grandes clásicos. “Nuestra película
El género, para Stone, es “una forma de arte en donde cantas para expresar un estado de ánimo”
es moderna y, por lo tanto, teníamos que dotarla de una buena dosis de realismo. La La Land es un musical naturalista, y por eso tuvimos que establecer un puente entre el estilo de actuación de los 50 y el de hoy”, recuerda la actriz.
Reconoce Stone sentirse inspirada por esos viejos musicales pero su mirada es mucho mas contemporánea. Aunque ciertamente aprecia las nominaciones y los premios que ha recibido hasta ahora, Stone cree que quien se merece todo el crédito por el éxito de la película es su director. “El mérito de La La Land es de Demian Chazelle”, afirma. “El sabía perfectamente cómo la tenía que filmar, qué era lo que tenía que sentir el espectador y dónde había que poner los números musicales. Siempre tuvo una mirada muy clara sobre cual era la película y nunca perdió el rumbo durante la filmación”.