mSchools, un programa de éxito en la comunidad escolar
Impulsado por Mobile World Capital Barcelona, el programa mSchools ofrece numerosas facetas educativas encaminadas a fomentar la capacitación digital entre los alumnos catalanes. Creado en el 2013 con la colaboración de la Generalitat, el Ayuntamiento de Barcelona y GSMA, inicialmente fue diseñado como una asignatura optativa, la que venía a ser Tecnología en 4.º de ESO. Su propósito era ayudar en la educación a través de las tecnologías móviles. El éxito de la iniciativa la ha expandido a 3º de ESO, Bachillerato y Ciclos Formativos.
A partir de la creación de materiales nuevos basados en el desarrollo de una app para móviles, los estudiantes deben trabajar en las aulas y evolucionar en sus trabajos. Una asignatura que, según el director de mSchools, Albert Forn, “tiene mucho a ver con la emprendeduría, el programario, pero también fomenta el trabajo en equipo” ya que los alumnos aprenden a trabajar por proyectos, lo que promueve la interacción entre ellos para canalizar sus habilidades.
En mSchools el profesor pasa a ser un mentor que ayuda durante el curso a hacer evolucionar el proyecto de cada aula. “Se interpretan numerosos conceptos como el emprendimiento como modelo de negocio, la exposición pública de proyectos o el conocimiento del usuario, entre otros”, unas herramientas que hasta el momento no se habían desarrollado desde la escuela y que “acercan la educación al mundo digital actual”.
Los docentes que participan en el programa mSchools tienen a su alcance un grupo de “expertos voluntarios” que pueden ayudarles a realizar la mentorización de sus alumnos. Los expertos, destaca Forn, “son profesionales de la in- dustria del móvil o de las tecnologías” que se han brindado a asesorar en ciertos temas para que se puedan desarrollar los proyectos. Paralelamente desde mSchools se desarrollan materiales de asignaturas para cada etapa escolar, “siempre con la intención de introducir estos conocimientos digitales en el ámbito escolar”.
Otra de las iniciativas desarrolladas para mSchools ha sido el Mobile History Map, una iniciativa de georeferenciación del patrimonio cultural en el entorno de los centros educativos, que promueve el uso de la tecnología móvil aplicada en las asignaturas de humanidades. Armados con móviles y tabletas, los estudiantes geolocalizan y documentan puntos de interés. “Se trata de un programa muy transversal –detalla Albert Forn– que implica numerosas competencias y asignaturas, como por ejemplo Lengua y Arte” para trabajar toda una serie de nuevos conceptos. “Si les damos a los alumnos la capacidad de imaginar y crear, aparecen soluciones novedosas, inéditas y muy prácticas”.
“Hemos tenido mucha suerte”, reconoce el director de mSchools por la gran acogida que ha tenido el programa. Destaca la “gran participación de las chicas, un hecho inusual en programas tecnológicos”. Casi el 50% de los participantes son mujeres. “La clave es que dejamos que sea el alumno quien sea el protagonista y escoja los proyectos en los que se quiere involucrar”. Una de las apps que más éxito han cosechado es la que permite compartir ropa entre las alumnas. Un armario virtual con sus propias prendas a disposición de las compañeras. También llamó la atención la app creada por un grupo de adolescentes que realizaban el control y seguimiento de un recién nacido. A través del móvil, las usuarias pueden controlar el peso, la alimentación, el crecimiento y recibir consejos durante los primeros años de vida del bebé. Otro grupo de alumnas trabajó el maltrato de género con una app en la que ofrecen información o ayuda, de forma mucho más próxima, para ayudar a las afectadas a salir de la situación en la que se encuentran.
El proyecto mSchools “siempre ha sido muy cuidadoso en incentivar el trabajo sobre problemas del propio entorno socioeconómico”, detalla Forn, siempre con la mirada puesta en la búsqueda de soluciones a problemas que los propios chicos y chicas detectan en su ámbito más próximo.
Destaca la gran participación de las alumnas, hecho nada habitual en programas tecnológicos, que representan casi el 50% de participantes