Oro negro en Alaska
El grupo energético explora en Alaska junto a su socio Armstrong Energy
Repsol, junto a su socio Amstrong Energy, ha encontrado un gran yacimiento que incrementa sus recursos en Estados Unidos, según estimaciones de las empresas, hasta alcanzar un total de 1.200 millones de barriles de crudo ligero.
Repsol, junto a su socio Armstrong Energy, ha encontrado en Alaska un gran yacimiento que incrementa sus recursos en la zona, según estimaciones de las empresas, hasta alcanzar un total de 1.200 millones de barriles de crudo ligero. La petrolera española asegura que se trata del “mayor descubrimiento convencional de hidrocarburos logrado en los últimos 30 años en el suelo de Estados Unidos”. El nuevo sondeo confirma que la formación geológica en el subsuelo Nanushuk, en la zona de North Slope, tiene al menos 32 kilómetros de extensión.
El nuevo hallazgo, denominado Horsehoe, aumenta así las dimensiones y los recursos de las exploraciones previas llevadas a cabo en Nanushuk. En concreto, los dos socios petroleros ya habían encontrado otras reservas en el 2014 y el 2015 en la zona norte, en Pikka.
Tal y como informó Repsol mediante un hecho relevante a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la multinacional posee una participación del 25% de Horseshoe y el 49% de Pikka. El resto corresponde a Armstrong, que es actualmente el operador. Aprovechando los descubrimientos ya realizados hace un par de años en Pikka, los socios están tramitando las correspondientes licencias de desarrollo, por lo que tienen previsto que la producción en dicha zona comience a partir del 2021, con un potencial de extracción de 120.000 barriles de petróleo al día (de los que le corresponden a Repsol un 49%). Para dar idea de las mag- nitudes de la futura producción, la multinacional presidida por Antoni Brufau obtuvo el año pasado en Estados Unidos unos 120.000 barriles de crudo al día. Por tanto, la explotación de la zona de Pikka supondrá prácti- camente aumentar un 50% su actual producción.
Repsol empezó a explorar en Alaska hace ya casi un década y, desde el 2011, ha realizado, de la mano de Armstrong Energy, diversos hallazgos, en la zona de North Slope. Los pozos del último hallazgo se denominan Horseshoe-1 y Horseshoe-1A. El primero, perforado a una profundidad de 1.828 metros, descubrió una columna de petróleo de más de 46 metros. Mientras que en Horseshoe-1A, que llegó a 2.503 metros de profundidad, se encontró una columna de petróleo de más de 30 metros.
Con este hallazgo, la reserva en la zona de la petrolera crece y alcanza los 1.200 millones de barriles
Las distintas campañas en la zona de North Slope, “que se consideraba madura, pusieron de manifiesto un significativo nuevo potencial”, aseguraron en el comunicado a la CNMV. “Además las infraestructuras existentes en Alaska permitirán que lo recursos se desarrollen con mayor eficacia”.
La empresa española no realizaba una exploración tan exitosa desde el 2009. Repsol tiene explotaciones petrolíferas en cinco zonas de Estados Unidos: Texas, Oklahoma y Kansas, en aguas norteamericanas del golfo de México, Pennsylvania y Alaska.