Empresas cuánticas crean su asociación mundial en Barcelona
Giorgio Maritan dirige la QWA, que pretende acercar científicos y empresas
La primera revolución de las tecnologías cuánticas permitió el láser, las resonancias magnéticas o el GPS. La segunda revolución, que ahora está en marcha, tendrá un gran impacto en las telecomunicaciones por satélite y en la ciberseguridad. Grandes empresas, como Google o IBM, están invirtiendo en ello. Pero también hay empresas cuánticas “de nicho”, y cuatro de ellas acaban de asociarse en la Quantum World Association (QWA), que tendrá su sede en Barcelona.
Entanglement Partners, de Barcelona, es cofundadora de la QWA junto a la australiana H-Bar, la canadiense EvolutionQ y la suiza IDQuantique. Y las funciones de dirección de la asociación las ha asumido Giorgio Maritan, ex director general de Chupa Chups, actualmente vinculado también al Foro de Marcas, business angel y socio de Entanglement. El primer presidente de la QWA será Oscar Sala, otro de los socios de Entanglement.
“La QWA pretende conectar la parte científica con el sector de empresas de nicho, pensando en las aplicaciones que pueden atraer a la gran industria”, explica Maritan. “La computación tradicional se basa en la combinación de 0 y 1. La cuántica permite superponer opciones hasta el infinito. Hay una batalla para ver quién saca el primer ordenador cuántico efectivo para el mercado. Será un gran salto que acelerará el análisis de big data y la seguridad”, añade Maritan.
Entanglement Partners nació en el 2016 de la colaboración entre el think tank cuántico BarcelonaQbit y la venture builder de Opentrends The Carrot Cake. Tiene oficinas en Madrid, California e India, y está presidida por Josep Maria Vilà (que fue responsable de Indra en Catalunya), y entre sus socios figuran José Ignacio Latorre, Juanjo Jiménez, Alfonso Rubio-Manzanares o Josep Maria Martorell.