Movilizaciones multitudinarias cuando Trump cumple los 100 días
Washington vuelve a vivir una gran jornada de protesta con la Marcha del Clima
Se cumplían 100 días desde que Donald Trump tomó posesión como presidente de Estados Unidos y Washington volvió a vivir una nueva protesta multitudinaria. Era la Marcha del Clima, la manifestación convocada ayer por organizaciones ecologistas contra la política negacionista de Donald Trump sobre el cambio climático. Pero si algo le agradecen a Trump sus adversarios ideológicos es su capacidad para unificar todos los movimientos de protesta a la ofensiva conservadora que pretende llevar a cabo. Y el día más caluroso en lo que va de año, con 33 grados a la sombra y un bochorno deshidratador, desfilaron con los ecologistas desde el Capitolio hasta la Casa Blanca y el obelisco del Washington Monument organizaciones de inmigrantes, grupos indígenas, entidades de apoyo a los refugiados, colectivos antirracistas. gais, lesbianas y transexuales y sobre todo muchas, muchas, mujeres, muchas más que hombres, especialmente motivadas por las amenazas presupuestarias contra los centros de planificación familiar.
Deborah, una indígena de la tribu menominee, llegó con su familia de Wisconsin. “Estamos aquí para impedir que envenenen el agua de nuestra tierras con los oleoductos”, señalaba. Un poco más allá, Javier Lunavictoria, de origen peruano, lideraba la marcha del colectivo Casa, que venía desde Maryland para defender los derechos de los inmigrantes. “Sí, es la Marcha del Clima, pero Trump ha conseguido articular una coalición de grupos afectados y pronto surgirá un líder que articule este movimiento tan impresionante”.
Michele Holmes se subió a uno de los cuatro autocares que desde Harlem, Nueva York, desplazaron a doscientos activistas hasta Washington para participar en la manifestación: “Trump quiere deshacer todo lo que hizo Obama. No entiende que el impacto del cambio climático nos afecta a todos, también a él, y sólo podremos evitarlo si cambiamos la forma en que vivimos”.
La protesta contra las políticas negacionistas del cambio climático adoptadas por la Administración Trump se han convertido junto a la movilización de las mujeres en un símbolo, puesto que si en algo Donald Trump no se ha mostrado ambiguo y ha tomado medidas drásticas desde el primer día ha sido para cancelar todos los programas de protección del medio ambiente que llevaba a cabo la agencia federal, que va a ver reducido su presupuesto el 31%. El director de la oficina presupuestaria de la Casa Blanca, Mick Mulvaney, se dio a conocer en la presentación del presupuesto con frases rotundas que estremecieron a medio mundo: “Consideramos que dedicar recursos
Todos los movimientos sociales se suman a las más de 375 marchas en las principales ciudades de EE.UU.
para luchar contra el cambió climático es malgastar el dinero de los contribuyentes y el presidente ha sido muy claro: no vamos a gastar un centavo en eso”. La mejor réplica podría ser la pancarta de Olivia Springberg, una joven activista de 16 años que advertía al presidente que con la crecida del agua del mar se hundirá su finca de Mar-a-Lago, en Florida.
Personajes más o menos populares comprometidos con la causa ecologista, como el actor Leonardo DiCaprio o el exvicepresidente Al Gore, también se apuntaron a la protesta de Washington, pero manifestaciones también más multitudinarias de lo que es costumbre se vivieron en las principales ciudades de Estaos Unidos, desde Nueva York hasta Los Ángeles, Seattle, Boston, Chicago, Detroit... 375 manifestaciones estaban previstas de costa a costa.
Cuando los manifestantes rodearon la Casa Blanca, Donald Trump se disponía a viajar a Harrisburg, Pensilvania, donde iba a celebrar sus cien días como presidente con un mitin estéticamente organizado igual que los de la campaña electoral. Fue en Pensilvania donde Trump consiguió, en contra de todas las previsiones, una victoria electoral clave que decidió el resultado.