Regresan las dos jóvenes perseguidas en Dubái por su homosexualidad
La joven hispanoargentina María Jimena Rico Montero, que estaba retenida en Estambul tras permanecer varios días desaparecida, y su pareja egipcia, Shaza Ismail Ibrahim, llegaron el viernes al aeropuerto de Barcelona-El Prat en buen estado de salud tras ser deportadas desde Turquía.
Las dos jóvenes acabaron así una historia de persecución. María Jimena Rico, nacida en Argentina y de padre español, viajó junto a su novia Shaza Ismail hasta Dubái para visitar a la madre de esta última porque se encontraba enferma. Sin embargo, esa enfermedad resultó ser un plan orquestado por el padre para retener a su hija en ese país.
Al enterarse de que los padres la habían denunciado por homosexual –en Dubái es un delito–, consiguieron huir en avión hasta Georgia, donde permanecieron tres días en casa de unos amigos, antes de cruzar luego la frontera turca en su huida hacia Europa. Ya en territorio turco, fueron detenidas en Samsun por no tener la documentación en regla. La policía les quitó el móvil y el pasaporte, y estuvieron esposadas e incomunicadas hasta que, tras 12 horas de arresto, fueron liberadas y pudieron viajar en autobús hasta Estambul. Allí fueron detenidas otra vez por la policía y llevadas hasta un centro de deportación.