Presentación feliz
Un año después de la celebración junto a Gilberto Gil de su cincuentenario en la música, Caetano Veloso regresó a Barcelona con un nuevo espectáculo compartido. Bajo el título de Caetano presenta Teresa ,el gran artista bahiano da a conocer al mundo a la cantante Teresa Cristina, todo un símbolo de la samba de Río de Janeiro. Hablamos de la intérprete que enamoró a Brasil con Teresa canta Cartola, un álbum de homenaje al poeta, compositor y cantante así llamado, autor de más de quinientas canciones y personaje clave en el desarrollo de la samba.
En un atestado Palau de la Música, con una significativa presencia de público brasileño, asistimos a un espectáculo en formato tres en uno, con una primera parte protagonizada por la cantante Teresa Cristina y el guitarrista Carlinhos Sete Cordas, un segundo set de Caetano en solitario y una reunión final de todos los artistas. Teresa desgranó el repertorio de Cartola con mucho encanto y buen humor, moviéndose con elegancia infinita en escena y deslumbrándonos con su impecable entonación. Acompañada por el extraordinario guitarrista Carlinhos Sete Cordas, la cantante carioca nos regaló deliciosas interpretaciones de clásicos cartolianos como O mundo é un moinho, Corre e olhe o céu o la espléndida Alvorada, amén de temas de otros artistas popularizados por Cartola como el Preciso me encontrar de Candeia, que fue aplaudido a rabiar por el respetable.
Luego, apareció Caetano Veloso para bucear a solas con su guitarra por su cancionero histórico, sin orillar sus éxitos más destacados (O leaozinho, Sozinho...) y recuperando pequeñas joyas menos conocidas de su fondo de armario como Enquanto seu lobo nao vem o A voz do morto, compuestos a finales de los años sesenta en los primeros tiempos del tropicalismo y en plena dictadura. El fenomenal artista también sobresalió al abordar y bordar un inevitable Cucurrucucú paloma en español, así como una soberbia recreación a cappella de todo un standard de Cole Porter como Love for sale.
Ya junto a Teresa y Carlinhos, Caetano redondeó el concierto, antes de los obligados bises, con un precioso Miragem de carnaval y un sensacional Desde que o samba é samba, ideal para ahuyentar la tristeza. Fue un final feliz a este magnífico Caetano presenta Teresa, que encandiló al personal por espacio de más de dos horas.