El fiscal general se replantea el cese de los fiscales del 3%
Maza ha pedido informes al jefe de Anticorrupción y a Grinda y Bermejo
Maza ha pedido informes al jefe de Anticorrupción y a los afectados para decidir
JOSÉ MARÍA BRUNET
Madrid Los funcionarios han alegado que algunos testigos piden contar lo que saben en Madrid
El fiscal general del Estado, José Manuel Maza, no da por cerrado el cambio de los fiscales que han llevado hasta ahora el caso del 3%, y se está replanteando la decisión de apartarlos de la investigación. Maza ha pedido informes detallados sobre dicho proceso, relativo a la supuesta financiación irregular de CDC, antes de tomar una resolución definitiva sobre el relevo de los fiscales José Grinda y Fernando Bermejo, que han llevado el asunto hasta ahora.
En medios de la Fiscalía General del Estado se asegura que el propósito del fiscal general es no resolver el contencioso surgido en torno a este cambio de los fiscales del caso del 3% hasta que haya estudiado las razones que le expongan el fiscal jefe de Anticorrupción, Manuel Moix, y los fiscales Grinda y Bermejo, que han conducido la investigación desde el inicio de las diligencias. Maza mantuvo a finales de abril una primera entrevista personal en la Fiscalía General con dichos fiscales del caso 3% en la que abordaron el conflicto planteado.
El día 21 de dicho mes la Inspección de la Fiscalía General del Estado se puso en contacto con Moix y con los dos fiscales que han investigado sobre la presunta financiación ilegal de CDC para notificarles que tenían que presentar un informe y hacer alegaciones con respecto al proyectado relevo de estos últimos. El fiscal jefe de Anticorrupción tenía hablado el asunto con el fiscal general del Estado, José Manuel Maza. La decisión era cambiar a los fiscales. Pero a la vista del conflicto surgido, Maza ha abierto un plazo para examinar la situación más a fondo y que las partes enfrentadas le den cuenta de sus respectivos motivos. Es decir, cuáles son las razones de Moix para quitar el caso a los fiscales que lo han llevado hasesos ta ahora. Y cuáles son las de Grinda y Bermejo para oponerse a ser relevados.
Maza ya conocía genéricamente los planes de Moix desde antes de nombrarle. El fiscal general era consciente de que Moix quería huir de los macroprocesos, potenciar las fiscalías territoriales y, sobre todo, llevar un control directo y personal de los principales asuntos que se investigaran en Anticorrupción. Con planteamientos, el cambio de Grinda y Bermejo no encontró inicialmente resistencia en la Fiscalía General. Pero luego se ha constatado que el asunto adquiría mucho más calado. El problema para el fiscal general es ahora encontrar una solución que facilite la continuación de las investigaciones sin dejar parte de bajas ni provocar desautorizaciones.
Lo que no va a ser posible es que ambas partes se pongan totalmente de acuerdo. Y, llegado el caso, no sería fácil que trabajaran con una gran armonía. El enfrentamiento ha ido muy lejos. En sus alegaciones, Grinda y Bermejo critican abiertamente al jefe de Anticorrupción. Afirman, por ejemplo, que cuando Moix les explicó por qué quería apartarles de la investigación, mencionó que el caso del 3% se instruye en El Vendrell, una localidad que, a su juicio, está más cerca de Barcelona que Blanes, donde Grinda y Bermejo van a seguir interviniendo en otro procedimiento.
Aparte de la cuestión de los modos y las anécdotas, en cuanto al fondo del problema Grinda y Bermejo exponen en sus alegaciones que tienen fuentes esenciales para la investigación sobre la financiación irregular de CDC y que algunos de los informantes prefieren que los contactos tengan lugar en Madrid para garantizar mejor la discreción de la comunicación. También consideran que las indagaciones están muy avanzadas y que los nuevos fiscales tendrían que dedicar algún tiempo a hacerse con unos antecedentes y una documentación muy complejas.