Mejorar en la Champions
El Barça no lo puede ganar todo cada año. Ni perderlo todo. Si gana la Copa ante el Alavés (todo el mundo la da por conquistada y deberán ponerse), la nota de la temporada estará entre un 6 y un 6,5. Los blaugrana han luchado la Liga hasta el último partido. Han logrado 90 puntos, tres menos que el Madrid, han caído por un partido, porque los blancos han sido más regulares en los momentos decisivos del campeonato, que han sido ante equipos pequeños, no sólo contra los grandes. Pero han influido otros factores. Tras la autocrítica de los errores propios (había que ganar en A Coruña o Málaga en la recta final) es evidente que las decisiones arbitrales han sido clave.
Suena victimista, pero es real. Al menos servirá si a partir de la próxima temporada las instituciones futbolísticas acogen la tecnología para ayudar a los desprotegidos árbitros y para hacer del fútbol un deporte más justo. Pero la Liga ha sido blanca por la regularidad del equipo de Zidane y porque el ecosistema habría salido seriamente perjudicado si la hubiera ganado otro equipo. En los últimos nueve años, el Barça ha conquistado seis campeonatos; el Madrid, dos y el Atlético, uno.
El problema del Barça esta temporada ha estado en la Champions. Tras un espectacular inicio en la liguilla, ha acabado recibiendo demasiados goles. En octavos, el PSG le endosó cuatro y los blaugrana debieron efectuar la gesta europea jamás contada. Pero en Turín no fue aceptable encajar tres goles, tirando la eliminatoria y la Copa de Europa. Entre cuartos y octavos, al Barça le metieron ocho goles. Ese ha sido el fallo de la temporada. ¿Qué pasó?
Si el Barça gana la Copa, la nota de la temporada sería un 6,5 real, la ambiental estará en función de Cardiff
El 4-0 en París llegó después de un 0-6 al Alavés. El Barça estaba crecido. La derrota 2-1 ante el Dépor vino inmediatamente después de la goleada 6-1 frente al PSG. El Barça estaba crecido. El partido perdido frente al Málaga (2-0) llegó tras una de las mejores exhibiciones contra el Sevilla en el Camp Nou (3-0). El Barça estaba crecido. Lo de Turín tiene otras explicaciones, como esa sensación de que queda un partido de vuelta para un equipo que puede lograrlo todo. Faltó mentalidad en momentos clave.
Pero en fútbol nadie superó al Barça, cuyo juego maravilló a ráfagas. Nadie propuso un modelo mejor. Ha sido superado por la eficacia, pero no por la brillantez. La temporada será de suspenso si no ganan la Copa. Y de cómo quede el Madrid en la final de la Champions en Cardiff dependerá la nota ambiental. La real, entre un 6 y un 6,5. Con Liga hubiera sido muy notable y con Champions, excelente. Con Copa, bien aunque agridulce, pero aún deben ganarla.