La UE acoge a Ucrania como asociado, pero le afea la corrupción
La Unión Europea y el Gobierno de Ucrania tenían mucho que celebrar ayer en Kíev, la capital ucraniana, donde se celebró su 19.ª cumbre anual. Jean-Claude Juncker y Donald Tusk, por el lado europeo, y Petró Poroshenko, por el ucraniano, se felicitaron por la reciente aprobación del Acuerdo de Asociación, que pone a Kíev mirando a una futura integración en la UE. Pero no todo fueron parabienes, porque Juncker no dudó en criticar la escasa diligencia de las autoridades ucranianas en la lucha contra la corrupción, lo que está retrasando los avances hacia Europa que tanto desea Poroshenko. “La corrupción es uno de los grandes problemas de Ucrania”, aseveró el presidente de la Comisión en la rueda de prensa conjunta. Luego pidió “intensificar, como ustedes han hecho pero tal vez de forma insuficiente, la lucha contra la corrupción”.
A pesar de ciertos progresos a los que se refería Juncker, como una reforma del sistema judicial aprobada el año pasado, el Gobierno ucraniano ha recibido muchas críticas por su lentitud. El vicepresidente de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, recordó que la ayuda económica de la UE está ligada a los avances en esta materia. Y dijo que Ucrania tiene que cumplir 21 condiciones antes de octubre para desbloquear 600 millones de euros de esa ayuda. Una de esas condiciones es asegurarse que se aplique correctamente una reforma histórica que obliga a los altos funcionarios a declarar sus activos online.
La lucha contra la corrupción era una de las promesas con las que las autoridades actuales llegaron al poder en febrero del 2014, tras el Maidán, la revolución proeuropea que ese año echó del poder al ex presidente prorruso Víktor Yanukóvich.
Tanto la UE como el Fondo Monetario Internacional habían pedido la creación de un tribunal especial contra la corrupción. Juncker anunció ayer que en esta cumbre se ha llegado a otra solución. “Hemos acordado que si las autoridades ucranianas crean una Cámara especial dedicada a esta cuestión, será suficiente”, explicó.
Pero las autoridades ucranianas están satisfechas del acercamiento a la UE. Uno de los elementos que demuestran que el camino está abierto es la decisión que tomó el mes pasado Bruselas de permitir a los ciudadanos ucranianos entrar sin visado en el espacio Schengen. “Más de 100.000 ucranianos con pasaportes biométricos han usado ya este derecho”, se enorgullecía
Petró Poroshenko agradece a Bruselas la prolongación de las sanciones contra Rusia
ayer Poroshenko. Ellos han visto con sus propios ojos, subrayó el dirigente ucraniano, por qué Kíev aspira a unas relaciones más próximas con la Unión Europea.
Poroshenko también se mostró agradecido por el apoyo que la UE ha prestado a su país en el conflicto con Rusia, tanto por la anexión de Crimea en marzo del 2014 como tras el inicio de la guerra del este de Ucrania .
El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, conminó por su parte a los ucranianos a permanecer unidos y evitar conflictos internos. “Nos mantenemos firmes detrás de Ucrania”, dijo.
El Acuerdo de Asociación con Ucrania entrará en vigor el próximo 1 de septiembre. Muchas de sus medidas ya se han estado aplicando de forma provisional desde el 2014. Con su aprobación final, la cooperación aumentará en áreas como política exterior, justicia y educación.