MásMóvil da el salto del MAB al mercado continuo
El operador sube un 1,55% y vale ya 1.217 millones
El operador de telecomunicaciones MásMóvil se estrenó ayer en el mercado continuo con una subida de sus acciones del 1,55%, lo que la convierte en la primera empresa que consigue dar el salto del mercado alternativo bursátil (MAB) al mercado continuo. Los títulos de la firma oscilaron entre los 62,40 y los 60,11 euros, y cerraron a 62, no lejos de los máximos históricos que marcaron a principios de mes, de 64,99 euros. La firma acabó la jornada con una capitalización de unos 1.237 millones de euros.
El salto al continuo, pospuesto en varias ocasiones, se produce once años después de la creación “desde cero” de la compañía, cinco años después de empezar a cotizar en el MAB y al año siguiente de la compra de Yoigo, por 612 millones de euros, y Pepephone, por 158 millones, adquisiciones con las que se ha consolidado como el cuarto operador de telecomunicaciones de España.
“MásMóvil nació hace once años como una start-up. Supimos crecer en años de crisis con pocos recursos. Esa es una parte de nuestro ADN, saber crecer de forma eficiente”, señaló Meinrad Spenger, consejero delegado de MásMóvil.
Desde la salida al MAB, MásMóvil ha conseguido multiplicar su valor por 20, y convertirse en la mayor empresa de ese mercado por capitalización bursátil, ingresos y ebitda. Ahora estará en una posición intermedia por capitalización bursátil.
Para conseguirlo, la firma ha realizado diversas emisiones de deuda y ampliaciones de capital, para captar cerca de 900 millones de euros. Estas operaciones han incorporado a la firma accionistas de relevancia, como el gigante del capital riesgo Providence: primer accionista con un 18% del capital, y con la opción de aumentar sus acciones, con la conversión de una emisión de deuda convertible de 165 millones de euros. Entre sus accionistas están también las familias Ybarra, Careaga, Domínguez y Del Pino y gestoras como Fidelity, Santander, Popular, EDM y AzValor, entre otras.
El operador presentó esta semana sus resultados del primer trimestre, en el que perdió 41,8 millones, lo que supone multiplicar por ocho las pérdidas agregadas que registraron en el 2016 la compañía y Yoigo y Pepephone, que forman parte ahora de su perímetro, que fueron de 5,18 millones. Al cierre del primer trimestre, su deuda financiera neta se situaba en 777 millones. La firma prevé cerrar este ejercicio con unos ingresos superiores a los 900 millones de euros, con un beneficio operativo recurrente o ebitda de 200 millones.