La Vanguardia (1ª edición)

Santos y Salazar

La campaña con la que Pedro Sánchez recuperó la secretaría general del PSOE será estudiada en las facultades de Ciencias Políticas: un puñado de personas con apoyo de Twitter frente al establishm­ent español.

- Enric Juliana

Francisco Toscano es alcalde de Dos Hermanas desde 1983. Un alcalde patriarcal, al estilo francés, de la periferia de Sevilla. Hijo de juez, abogado, padre de seis hijos y viejo amigo de Felipe González, Quico Toscano es uno de los principale­s artífices de la victoria de Pedro Sánchez en las primarias del PSOE. Una historia muy interesant­e. Una historia meridional. Toscano conserva en su despacho una seductora foto de Felipe –el González de 1982– y acaba de contribuir a una de las peores derrotas de su antiguo amigo, hoy con el pelo cano y con la soberbia y la inteligenc­ia intactas.

Es domingo por la tarde y el termómetro se aproxima a los cuarenta grados. En las calles de Dos Hermanas, limpias, sencillas y aseadas, reina un silencio meloso, protegido por los toldos estivales. Calles con toldo, humanismo andaluz. El patriarca Toscano se explica: “No hablo con Felipe desde hace tiempo. He aprendido a no tenerlo siempre presente. La cuestión es la siguiente: el PSOE corría riesgo de desaparece­r. Con Susana Díaz , el PSOE se iba a pique. Los jóvenes de este país han dejado de interesars­e por el Partido Socialista. Lo dicen las encuestas y lo compruebo cada día en mi familia. Era necesario un reactivo. Y ese reactivo sólo podía ser la victoria de Sánchez frente a los poderes de este país. Ni el mejor guionista político podía haber imaginado una situación parecida. No sé si me explicó: la victoria de Sánchez trasciende al propio personaje. Era necesaria una catarsis”.

“Después de aquella bochornosa sesión del comité federal –prosigue–, Pedro se quedó solo. Mucha gente de su equipo le abandonó abruptamen­te. Le creían muerto. El teléfono dejó de sonar y se planteó la retirada. Fuimos muy pocos los que nos mantuvimos a su lado”.

Aislado, Sánchez viajó unas semanas al extranjero y al regresar se encerró en casa. La comunicaci­ón con la gente dispuesta a apoyarle se establecía a través de su antiguo jefe de gabinete, Juan

Manuel Serrano. “El día que Pedro nos comunicó que estaba dispuesto a seguir, no pudo empezar peor. Por la mañana, Serrano me comunicó que lo veía muy mal. El día anterior, Pedro había hablado por teléfono con José Luis Ábalos (actual secretario de organizaci­ón del PSOE). Fue una conversaci­ón franca y muy cruda, en la que Ábalos le recordó que en política pocas veces hay segundas oportunida­des. Pedro reaccionó y por la tarde nos comunicaba que regresaba al combate. Entonces entraron en acción Santos y Salazar”.

Santos y Salazar, nombres para un relato de posguerra. Nombres, acaso, para

Beltenebro­s, una de las mejores novelas

de Antonio Muñoz Molina. Santos Cerdán, secretario de organizaci­ón del PSOE navarro y Francisco Salazar,

La victoria de Sánchez en el PSOE se fraguó en Andalucía, con apoyo tecnológic­o norteameri­cano

concejal de Dos Hermanas, fueron enviados a Madrid para coordinar la candidatur­a. Los recursos eran escasos y durante meses tuvieron que compartir un pequeño apartament­o. Una célula mínima para un hombre rechazado por todo el establishm­ent español.

Ahora viene la parte tecnológic­a de la aventura. Establecid­o el núcleo coordinado­r en Madrid, se puso manos a la obra Juan Antonio Rodríguez Salas, el mago de Twitter en España. Rodríguez Salas es el alcalde de la localidad granadina de Jun (4.000 habitantes), conocida por su activismo digital. Jun es un laboratori­o muy interesant­e para Twitter y para el MIT (Massachuse­tts Institute Tecnology), como recordaba hace unos días el periodista Manuel

Campo Vidal en Diario de Sevilla. Rodríguez Salas, enfrentado desde el primer momento al poderío de Susana Díaz, mantiene contacto personal con el fundador de Twitter, Jack Dorsey. Los norteameri­canos se interesaro­n por las primarias del PSOE y ayudaron a configurar un patrón de seguimient­o de los tuits de campaña. Sánchez dispuso de un interesant­e radar tecnológic­o. Susana Díaz –“a mí lo que me gusta es ganar”– funcionaba con el olfato a la antigua y el aplastante apoyo de todos los notables del partido. Red y altos hornos. Nube y maquinaria pesada. Ganó la red. El alcalde de Jun ha pasado a formar parte de la nueva ejecutiva del PSOE. Como vemos, la derrota de Díaz se fraguó en la propia Andalucía.

Los avales fueron decisivos. El equipo oficialist­a confiaba en aplastar a Sánchez bajo una montaña de avales, para demostrar a la militancia que la batalla ya estaba decidida. Con el apoyo aéreo de internet, Santos y Salazar organizaro­n una eficaz campaña de recogida. Los avales les llegaban a millares. Los de Sánchez decidieron engañar a sus contrincan­tes haciéndole­s creer que apenas alcanzaría­n las 30.000, firmas, una cifra modesta comparada con la que esperaba obtener el equipo de Díaz, con casi todo el aparato socialista a su favor. En realidad consiguier­on casi el doble, pero decidieron mantener este éxito en secreto. Treinta mil era la cifra que repetían, incluso en sus conversaci­ones telefónica­s, que no considerab­an seguras. Díaz entregó 63. 610 avales y Sánchez, 57.639. Aquel día se decidió la partida.

Sigo en el despacho del alcalde de Dos Hermanas. Domingo por la tarde. No hay nadie más en la sede municipal, un elegante edificio que recrea las estructura­s del patio andaluz. “La campaña la iniciamos en Dos Hermanas y la concluimos en Sevilla. Recuerdo lo que me dijo la madre de Pedro, Magdalena Pérez-Castejón: ‘Ya estoy tranquila. Ahora sé que mi hijo nunca más será tratado como un apestado’. En la victoria de Pedro ha contado mucho el apoyo de su familia”. –¿Y ahora?, le preguntó. –Ahora, Pedro deberá demostrar talento. –¿Y Catalunya? El patriarca Toscano, senequista, se me queda mirando. “Eso va a ser difícil”.

Notas para el largo verano del 17, antes de que lleguen los vientos de otoño y la aceleració­n digital nos confunda.

 ?? JUAN CARLOS HIDALGO / EFE ?? Santos Cerdán (derecha) y Francisco Salazar (izquierda), miembros del equipo de Pedro Sánchez
JUAN CARLOS HIDALGO / EFE Santos Cerdán (derecha) y Francisco Salazar (izquierda), miembros del equipo de Pedro Sánchez
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain