Asalto fallido
Sólo uno de los 200 inmigrantes que trataron de saltar anoche la valla de Melilla alcanzaron su objetivo soñado.
Las Fuerzas de Seguridad españolas y marroquíes repelieron a primera hora de la mañana de ayer un intento de salto en grupo protagonizado por unos 200 inmigrantes de origen subsahariano. Varios llegaron a echarse al agua del mar para bordear el espigón del Tarajal: dos pasaron, pero sólo uno fue trasladado a la ciudad española tras ser rescatado con hipotermia por el Servicio Marítimo de la Guardia Civil. El otro fue devuelto a Marruecos bajo la figura legal del rechazo en frontera.
Según explicaron fuentes de la Delegación del Gobierno, las cámaras térmicas de vigilancia del perímetro fronterizo de Ceuta que maneja la Guardia Civil detectaron a las 6.25 horas a un grupo formado por unas 200 personas que, “a la carrera”, se dirigían por la costa marroquí hacia el espigón marítimo del Tarajal.
La mayor parte del grupo fue rechazada por los efectivos marroquíes movilizados, mientras que la Comandancia local de la Guardia Civil activaba varias unidades de su Servicio Marítimo y de los Grupos Especialistas en Actividades Subacuáticas (GEAS) para auxiliar a los que llegaron a internarse en el agua. En esa misma zona murieron 15 subsaharianos el 6 de febrero del 2015 intentando acceder a territorio español. La Guardia Civil empleó material antidisturbios para frenar la entrada de más de un centenar de personas por la playa y 16 agentes de la Guardia Civil, entre ellos un capitán, un teniente, un sargento fueron imputados. La causa fue archivada.
El lunes pasado fueron devueltos bajo esa figura legal de rechazo de frontera otras nueve personas. El joven con síntomas de hipotermia fue trasladado a la base del Servicio Marítimo del Instituto Armado en el puerto de Ceuta y luego pasó al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes, donde están cerca de 700 extranjeros.