Energía ciudadana
El pequeño pueblo de Pujalt, en la comarca de l’Anoia, acoge el primer molino eólico levantado mediante participación popular con el objetivo de democratizar la energía.
El primer aerogenerador de España promovido por iniciativa ciudadana está a punto de concluir en Pujalt (Anoia). El proyecto Viure de l’Aire del Cel, obra de la sociedad Eolpop, ha reunido 1,5 millones de euros, aportados por los 385 primeros inscritos, y su meta es llegar a los 500 participantes para cubrir una inversión de 3,05 millones. El molino medirá de 135 metros, y el diámetro del rotor (el círculo que forman las pales al girar), 103. Su potencia será de 2,35 MW y producirá la electricidad equivalente al consumo de unas 2.000 familias.
El objetivo de la iniciativa es “lograr una plena democratización de la energía y hacer que la gente pueda ser propietaria de las infraestructuras eléctricas”, destaca Pep Puig, uno de sus promotores.
El proyecto no cuenta con ninguna ayuda ni crédito. No es una inversión tradicional, sino que quiere formar parte de “una economía social”. Los participantes obtendrán cada año parte de los ingresos correspondientes a la venta de la electricidad, de manera que estima que podrán recuperar plenamente la inversión en unos 20 años. “Esta es una manera de también de compensar las emisiones de gases invernadero generadas en nuestras actividades”, resalta Josep Puig