Colvin consigue 2 millones y prepara el salto a Europa
La compañía de envíos de flores factura 500.000 euros
Creada hace un año, tiene su sede en el Mercat de la Flor de Mercabarna y emplea a 24 personas
Poco más de un año después de su fundación, la empresa de envíos de flores Colvin acaba de cerrar una ronda de inversión de dos millones de euros, con la que potenciará su presencia en España y prevé, en los primeros meses del 2018, dar su salto internacional con el inicio de operaciones en Francia o Italia.
La empresa se creó en noviembre del 2016 de la mano de Sergi Bastardas, Andrés Cester y Marc Olmedillo. Los tres eran compañeros de Esade y se reencontraron viajando en el AVE cuando los tres trabajaban en Madrid –en Amazon, Citibank y Glaxosmithkline–. Recordando las ventas de rosas por Sant Jordi, se les ocurrió aplicar la digitalización para transformar el envío de flores, pensando en mejorar la experiencia del comprador. Volvieron a Barcelona y pusieron en marcha Colvin, con 300.000 euros iniciales aportados por Sitka Capital, directivos de Amazon, Google y Citigroup, Esade Ban, y un family office, luego sumaron financiación pública, y en verano entró Samaipata Ventures; sumaron así un primer millón.
Y ahora, los nuevos dos millones han sido aportados por Samaipata Ventures, Mediaset, un fondo portugués e inversores como Hugo Arévalo (fundador de Tuenti y actual presidente de Hawkers).
La compañía asegura que desde principio de año a ahora, han multiplicado por diez su volumen de negocio: confirman que cumplen la previsión de cerrar el 2017 con una facturación de alrededor de medio millón de euros.
Con una plantilla de 24 personas, tiene su sede operativa en el Mercat de la Flor de Mercabarna, desde donde da cobertura a toda España; además, ha empezado a cerrar acuerdos con floristerías (dos en Madrid, una en Barcelona) para servir envíos en dos horas.
“Intentamos mejorar la eficiencia operativa, conectando directamente con los productores, y con algunas floristerías”, explica Bastardas. Con esta estrategia, quieren también desestacionalizar los envíos de flores, más allá de los días señalados. “Tenemos un servicio de suscripción, pero el grueso del negocio viene de regalos de particulares. Y más del 30% de los envíos es de clientes recurrentes”. Bastardas dice que en Estados Unidos, Reino Unido o Francia ya hay alguna iniciativa similar, “pero el sector no está maduro, y hay oportunidad de crear el líder europeo, que es lo que queremos ser”.