Un parque dignificará el acceso norte a Mataró
La construcción de un depósito de agua de 7.000 m3 en el barrio de Cerdanyola propicia un nueva zona verde de 17.000 m2
Una de las zonas más degradadas del barrio de Cerdanyola de Mataró (Maresme), en cuyos descampados ahora se acumula suciedad, coches desballestados y vertidos incontrolados, a finales del año próximo se convertirá en un gran parque junto al que se construirá una nueva zona comercial urbana. Todo ello integrado en un mismo proyecto, gracias a la construcción de un gran depósito de agua de 7.000 m³ considerado de “gran interés estratégico” para la ciudad.
Antes de finalizar el 2018, nueve meses después de empezar las obras, la capital del Maresme habrá remodelado la zona que limita con Argentona y la autovía C-60 que conecta Mataró con Granollers. “Será la nueva fachada norte de Mataró” apunta el alcalde, David Bote, satisfecho de que la compañía municipal de aguas AMSA pueda tener capacidad de endeudarse con 6,77 millones a crédito para construir un gran depósito de abastecimiento de agua potable. “Con ello podremos garantizar el modelo de subministro de agua a la ciudad y fortalecer el servicio público” en una urbe con un elevado porcentaje de eficiencia del 92% en el sistema de distribución, con apenas pérdidas.
La obra civil se centra en el depósito de 7.000 m³ y en las distintas arterias de subministro, así como en la reforma total de la antigua mina de agua de la avenida Puig i Cadafalch y las conexiones hasta la plaza de Granollers, en el centro.
Del nuevo depósito saldrán dos grandes canalizaciones de seis kilómetros que conectarán con los depósitos de Can Boada y el barrio de Pla d’en Boet. Con ello, Mataró contará con un sistema alternativo de abastecimiento en caso de incidencias y dispondrá de un punto más de captación de Aigües TerLlobregat. Al mismo tiempo, se mejora el subministro del polígono industrial Pla d’en Boet y se garantiza una capacidad en el depósito de reserva de agua propia de 4.000 m³.
Las obras de urbanización contemplan un gran parque de 17.000 m2 que dará continuidad a una de las zonas forestales de la ciudad, el parque de Els Garrofers. La parte superior del gran depósito se habilitará como mirador, desde el que se podrán admirar las vistas a la Serralada Litoral y Argentona. A los pies de la nueva zona verde, en la Ronda Bellavista, junto a uno de los actuales accesos al barrio de Cerdanyola, popularmente conocida como Rotonda del Dara, está prevosta la construcción de una zona terciaria, un espacio de comercios urbanos y de servicios junto a la zona deportiva de El Sorrall.
“Se dignifica una zona muy castigada”, reconoce el alcalde. David Bote lo considera “una obra estratégica” con una nueva conectividad viaria desde la autopista C-32, desde la que se visualizará “la nueva fachada verde de Mataró”.
El proyecto, considerado de gran importancia para la ciudad, tiene un presupuesto de 6,7 millones de euros