Las mujeres cobran un 16% menos que los hombres en Europa
La brecha salarial en España es de un 14% y se dispara a un 34% al llegar a la jubilación
La brecha salarial entre hombres y mujeres por el mismo trabajo es una lacra de la que no se salva casi ningún país europeo. En España, las mujeres cobran un 14% menos que los hombres, una diferencia que se recrudece al llegar a la jubilación, cuando alcanza un 34%. En algunos estados europeos la situación incluso ha empeorado.
Antes de despedirse, hace una petición importante para ella. Quiere ser citada añadiendo también el apellido de su madre. “Siempre lo pido y me parece que hoy es especialmente importante que aparezca”. Ruth Giralt Figueras es inspectora de los Mossos d’Esquadra y responsable de las comisarías de Esplugues y Sant Just Desvern. Pertenece a ese 21% de mujeres que integran la policía catalana, uno de los porcentajes de presencia femenina más altos de Europa en un organismo policial, pero que no supera el 8% en la escala de mando. ¿Cuota? “No me gusta la fórmula, pero entiendo que hasta que no se garantice una mayor presencia en los puestos de responsabilidad hay que garantizar de alguna manera que también mandemos”.
Si tenía alguna vocación esta mujer con antecedentes en Santiago de Cuba, una madre enfermera y un padre periodista, era la de impartir justicia. Empezó estudiando Derecho y unos amigos le descubrieron los mossos. Entró en la novena promoción y es consciente del radical cambio que ha experimentado la organización. “Somos una policía que ha crecido siendo espejo de la sociedad a la que servimos. Esa actitud paternalista y protectora del inicio en relación a las agentes se ha ido perdiendo y a día de hoy, salvo en el GEI (Grup Especial de Intervención), estamos en toda la estructura”.
Ya no se entenderían los Mossos, ni cualquier otra policía, sin la presencia de mujeres. Ellas han hecho mejores los cuerpos de seguridad aportando otra manera de entender y gestionar los conflictos de orden público y las investigaciones. Es otra mirada que la inspectora Giralt pone en valor. ¿Qué falta? “Muchas más mujeres, nuevas promociones con una mayor presencia de esas jóvenes que interpelan de tú a tú con sus compañeros hombres, sin complejos, sin prejuicios”. Aunque es difícil encontrar ahora policías menores de 30 años, tras demasiado tiempo sin la entrada de nuevos agentes, a los más jóvenes que patrullan “ya les ves como han interiorizado que en la calle uno protege al otro, sin distinción, que los dos son iguales”.
Asegura que nunca ha sentido el machismo dentro de los Mossos, aunque sí detectó miradas de recelo en sus inicios, en la calle, cuando la policía conservaba ese patrón de fuerza física y masculinidad que “afortunadamente” ya se ha perdido.