Trump se congracia con los empresarios latinos
Una actriz porno denuncia al presidente por tapar su ‘affaire’
De empresario a empresario. Ese fue el tono empleado ayer por el presidente Donald Trump para participar por primera vez en un acto con la comunidad latina de Estados Unidos, en el que fue recibido y despedido entre aplausos, con toda la sala en pie. No era un foro cualquiera sino una cumbre de la Latino Coalition, una organización de empresarios de la comunidad hispana ligada a los republicanos.
“Sé que sois buenos hombres de negocios. Lo sé porque tuve que competir con vosotros para ser presidente”, les agasajó Trump, que contra todo pronóstico en las elecciones del 2016 se metió en el bolsillo a un tercio del voto hispano a pesar de su dura retórica antimigratoria y sus ataques a México. Ayer, evitó los conflictos y realzó las medidas aprobadas por su administración para favorecer a los pequeños negocios, desde la rebaja fiscal a la reducción de los trámites administrativos. Ni palabra del plan de construir un muro con México ni un insulto contra los extranjeros y sólo alguna alusión al bloqueo de la reforma migratoria, de la que culpó a los demócratas. “La comunidad latina personifica el espíritu pionero de Estados Unidos”, llegó a decir el republicano, que reclama máxima movilización a sus bases de cara a las elecciones del próximo otoño.
“No creo que Trump odie a los inmigrantes”, contemporizó Héctor Barreto, presidente de la Latino Coalition en conversación con periodistas. “Sé que hay muchos hispanos enojados con esta Administración pero si algo hemos aprendido es que dice muchas cosas pero luego no las hace. Hay que fijarse en lo que hace. Él era empresario del sector inmobiliario y ahí se dicen muchas cosas muy escandalosas, se amenaza, pero después de lo que se trata es de cerrar acuerdos”, adujo con la misma lógica práctica del presidente. Si los latinos republicanos votaron más a Trump que a Romney, para quien Barreto trabajó, no fue “porque fueran estúpidos o no supieran quién era” sino porque querían algo diferente.
Los aplausos de los empresarios latinos dieron un respiro a Trump horas después de que se conociera que la actriz porno Stormy Daniels le ha denunciado en los tribunales para declarar inválido el acuerdo de silencio que firmó días antes de las elecciones para silenciar la relación sexual que mantuvieron hace algo más de diez años. Fue el abogado del entonces candidato, Michael Cohen, quien negoció el acuerdo e ingresó 130.000 dólares en la cuenta de Stephanie Clifford, nombre real de la actriz.
La demanda sostiene que el pago pretendía influir en el resultado de las elecciones, al ocultar una información relevante a la ciudadanía sobre el candidato. En aquella época, Trump ya estaba casado con Melania y acababa de tener a su único hijo común, Barron. En el documento, los nombres secretos de la pareja eran Peggy Peterson y David Dennison. Sólo la actriz lo firmó, por lo que según su abogado, Michael Avenatti, es nulo. “Es hora de que ella pueda contar su historia y que el público decida quién dice la verdad”, defendió. La noticia, destapada por el Wall Street Journal en enero, llevó a Cohen a reconocer que había hecho la transferencia con sus propios fondos pero no explicó por qué razón.
“No creo que Trump odie a los inmigrantes”, afirma el líder de la asociación republicana de empresarios latinos