Sacresa es el único moroso millonario del Ayuntamiento de Barcelona
El Ayuntamiento de Barcelona dio a conocer ayer el listado de sus deudores de más de un millón de euros, una lista que hizo pública “en un nuevo ejercicio de transparencia y lucha contra el fraude fiscal”, explicaron ayer fuentes municipales, en el que aparece un único moroso: la promotora inmobiliaria Sacresa Terrenos 2, SL, que a fecha de 31 de diciembre del 2017 debe al Consistorio un total de 1.645.845,25 euros.
Según estas mismas fuentes, la deuda se corresponde básicamente a impagos del impuesto de bienes inmuebles, plusvalías y también algún impuesto sobre actividades económicas.
El Ayuntamiento recordó a través de un comunicado que Sacresa, que presentó concurso de acreedores en junio del 2010 con una deuda de 1.800 millones de euros, suscribió con la inmobiliaria un convenio para hacer efectiva la deuda, pero que lo ha incumplido. El Ayuntamiento ha llevado diferentes actuaciones de embargo e investigación patrimonial a raíz del incumplimiento, pero siempre con resultado negativo.
Según fuentes municipales, el hecho de que tan sólo haya un deudor es una señal del buen funcionamiento del Institut Municipal d’Hisenda, que cuenta con un índice de recaudación del 84,5% cuando en Madrid es del 89,1%; en València, del 88,4%; en Zaragoza, del 87,3%, o en Sevilla, del 62,2%.
El instituto ha llevado a cabo durante este mandato otras actuaciones dirigidas a luchar contra el fraude fiscal de grandes contribuyentes a través de la inspección lo que, entre otros resultados, ha permitido reclamar al Ayuntamiento 1,2 millones de euros a varios centros comerciales por impuestos presuntamente no declarados. Según estas mismas fuentes, se trata de cuatro grandes tiendas que tributaban desglosadas por diferentes actividades, según el tipo de venta de cada sección en lugar de un único epígrafe de grandes superficies.
Otra actuación, explican desde el Ayuntamiento, ha permitido también detectar un impago de cerca de tres millones de euros por parte de una gran compañía eléctrica al no haber abonado entre los años 2011 y 2015 parte de la tasa que se aplica por la utilización privativa del dominio.
“En el Ayuntamiento estamos cambiando e intensificando la inspección fiscal y poniendo el foco y la lupa sobre los grandes contribuyentes, todo y que requieren un mayor esfuerzo pero que suelen comportar desviaciones mayores. No hay privilegio para nadie y todo el mundo tiene que cumplir sus obligaciones tributarias”, manifestó el primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello.