30 metrópolis mundiales y más de 200 expertos debaten los retos de las ciudades del futuro
El Congreso Post-Hábitat III ha puesto sobre la mesa la hoja de ruta que hay que seguir para mejorar las metrópolis del futuro
Las ciudades tienen cada vez más peso en el mundo y la coordinación metropolitana se revela fundamental para que sean cada vez más habitables, sostenibles y equitativas. El Área Metropolitana de Barcelona (AMB) ha organizado, en mayo, un congreso internacional de líderes y expertos en conurbaciones urbanas, que han analizado cómo dotar de visión metropolitana los acuerdos de la cumbre mundial Hábitat III. A través de esos acuerdos, los Estados se comprometen a conceder mejores instrumentos jurídicos y financieros a las administraciones locales, pero todavía queda poco reconocida la importancia de las áreas metropolitanas. Por eso, corporaciones supramunicipales de todo el mundo reivindican más reconocimiento institucional, a la altura de la responsabilidad que tienen en la consecución de los retos del siglo XXI.
Una treintena de metrópolis mundiales y más de 200 especialistas –entre responsables políticos, expertos académicos y gestores y técnicos– han participado en el encuentro Post-Hábitat III, los días 22, 23 y 24 de mayo, en el Espai Francesca Bonnemaison de Barcelona, y han puesto en común soluciones concretas y estrategias en cuatro ámbitos: sostenibilidad, planificación territorial, cohesión social y desarrollo y competitividad. Los cuatro deben abordarse desde dos dimensiones a la vez, la participación ciudadana y la gobernanza metropolitana.
Alfred Bosch, vicepresidente del Área Internacional de AMB, destaca que la Barcelona metropolitana desea tener una función clave en políticas y temas troncales que se desprenden de Hábitat III: “La máxima aspiración de este congreso es traducir los acuerdos de Quito en soluciones urbanas muy prácticas, que muestren que podemos pensar globalmente y actuar localmente”. Gracias a las conferencias, los debates y las visitas sobre el terreno, la metrópolis se proyecta al mundo como un referente en gestión urbana. El encuentro ha contado con personalidades muy destacadas, como el expresidente colombiano Ernesto Samper; Juliette Michaelson, vicepresidenta del Regional Plan Association de Nueva York, Tae-hyung Kim, del gobierno metropolitano de Seúl; Maty Mint Hamady, presidenta de la conurbación de Nouakchott (Mauritania), y Paola Arjona, del gobierno de Ciudad de México.
LA GESTACIÓN METROPOLITANA DEL CONGRESO Sin embargo, la organización de un congreso de este alcance esconde más de un año y medio de trabajo para convertir en una hoja de ruta compartida y ambiciosa la diversidad de agendas de municipios y disciplinas. Los últimos seis meses, además, AMB ha celebrado cuatro jornadas presenciales en las que se han acotado los consensos y las prioridades que inspiran la contribución metropolitana en la agenda urbana global. La primera fue un seminario, en noviembre, para desgranar cuáles son elementos clave de Hábitat III para las metrópolis y las administraciones supramunicipales. Contó con personalidades destacadas, como Paulius Koulikasuskas, director del Programa de las Naciones Unidas por los Asentamientos Humanos, o Salvador Rueda, director de la Agencia de Ecología Urbana de Barcelona. Fruto de esa identificación de prioridades, la segunda cita –una mesa de expertos y académicos, el 30 de enero– definió los cinco ámbitos que trabajaría el congreso barcelonés.
Los preparativos siguieron en febrero y en marzo, con dos encuentros de ayuntamientos metropolitanos que aportaron propuestas al congreso y mostraron la vocación realmente metropolitana de la cita barcelonesa. Así, los representantes municipales enfatizaron que el refuerzo de la coordinación entre municipios es decisiva para ganar sinergias y reducir duplicidades, y subrayaron que los ayuntamientos trabajan en primera línea para resolver problemas sociales y actualmente cuentan con muy pocas herramientas. Coincidieron también en la necesidad de favorecer la pluricentralidad a través de nuevos polos de servicios y liderazgos, más allá de la capital. En cuanto a buenas prácticas, algunos de los ejemplos señalados fueron la participación ciudadana en Badalona, la recuperación del cauce fluvial en Sant Andreu de la Barca y la transformación de la carretera N-II en avenida humanizada en Pallejà.
La visión metropolitana es clave para lograr los objetivos de Hábitat III y para que las ciudades sean más habitables, sostenibles y equitativas Las conclusiones del congreso celebrado en Barcelona se elevarán a la agenda internacional como contribución especial sobre el hecho metropolitano