China quiere apertura
Un día después de activar los aranceles contra EE.UU., China ha recordado que es partidaria del libre mercado.
China quiso ayer despejar dudas sobre su política monetaria en el complejo escenario geoestratégico que se avecina. El gigante asiático, uno de los principales destinatarios de las medidas proteccionistas de la Administración Trump, dijo que mantendrá el camino de apertura de sus mercados y otras reformas de corte económico que han elevado su crecimiento, según declaraciones del primer ministro, Li Keqiang, recogidas por Reuters. El mensaje, que parece dirigido directamente a los mercados, llegó un día después de que Washington y Beijing introdujeran mutuamente aranceles a productos importados por valor de 34.000 millones de dólares, unos 29.000 millones de euros.
China abrirá más su puerta a productos extranjeros, ya que el libre comercio necesita mantenerse con firmeza para asegurar un crecimiento económico mundial, dijo Li en una cumbre de líderes del este de Europa en Sofía. “Para productos extranjeros que cumplan las necesidades del consumidor chino, la puerta estará más abierta. Bajaremos las tarifas globales a la importación al mercado chino”, añadió a través de un intérprete, sin entrar en detalles.
Li explicó después que las reformas económicas habían desempeñado un papel vital en el crecimiento de China y que los fundamentales en los que se basaba no han cambiado. “La apertura ha sido un elemento crucial en la agenda reformista de China, por lo que continuaremos abriéndonos más al mundo, incluyendo ampliar el acceso al mercado para los inversores extranjeros”, concluyó.