Barcelona acoge este julio en las piscinas Picornell el Europeo de waterpolo.
Las piscinas Bernat Picornell acogen del 14 al 28 de julio el Europeo de waterpolo; otra ventana abierta de la ciudad al mundo
Tras la pobre imagen de los Juegos Mediterráneos de Tarragona y con el Mundial de fútbol de Rusia en la recta final, el foco deportivo se posa a partir del próximo fin de semana, con el permiso del Tour, de nuevo en Barcelona. La ciudad de los prodigios vuelve a ser capital del waterpolo, ahora como sede del Campeonato de Europa (del 14 al 28 de julio); una especialidad poco masiva pero enraizada en Barcelona desde hace más de 100 años.
“El waterpolo está presente en toda la ciudad: de los diez distritos, en siete hay equipos en División de Honor y Primera”, descubre Eugeni Ballarin, director general del Campeonato. ¿En cuántas Ligas españolas, de lo que sea, una ciudad acapara más del 40% de los clubs de la competición? En la División de Honor masculina, 5 de los 12 equipos son barceloneses y 9, catalanes. “Esto ha creado una red deportiva y social importantísima e histórica”. Sin embargo, Barcelona, que ya fue sede de los Mundiales del 2003 y el 2013 (de natación), nunca había organizado un campeonato de Europa de waterpolo solo. El precedente del Europeo de 1970 fue compartido con otras disciplinas. “Era hora de devolver a la ciudad lo que el waterpolo le ha dado”. Es la filosofía que inspira a la organización. Un campeonato moderno. En 32 ediciones del Europeo, las últimas han tenido como sedes las tradicionales cunas balcánicas y húngaras. Barcelona tenía que diferenciarse. “Buscamos hacer un campeonato que sea referente en aspectos que no se han desarrollado en otros certámenes. Por ejemplo, Budapest o Belgrado –señala Ballarin, citando las dos sedes que han acogido 4 de las últimas 8 ediciones– tienen una gran capacidad de movilización de público. Aquí no. Pero sí somos referentes en otros aspectos, como el audiovisual”. De modo que el eje del Europeo barcelonés será el espectáculo. “En la piscina se instalará una pantalla led de 270 m2 para los event presentations: un show no visto anteriormente, un espectáculo en torno al waterpolo, con actuaciones musicales de dj en directo, luces, música, efectos de sonido…” Un escenario icónico. Todo el Europeo (92 partidos) se disputará en un único recinto, las piscinas Bernat Picornell, en el anillo olímpico de Montjuïc. La instalación que crearon en 1969 Antoni Lozoya y Joan Ricart es uno de los escenarios más icónicos del waterpolo, que ya acogió la final de los Juegos de 1992, los Mundiales 2003 y 2013 y las Final Six de la Champions masculina del 2014 y el 2015. Para esta ocasión, la organización ha hecho de la piscina una pequeña bombonera instalando una cuarta grada (supletoria), que amplía el aforo a 4.122 asientos. Los entrenos serán en las piscinas de 8 clubs subsedes que han cedido sus instalaciones, implicándose en la organización: Barcelona, At. Barceloneta, Horta, Montjuïc, Sant Andreu, Hospitalet, St. Feliu y Molins. Notable expectación. La visión desoladora de las gradas despobladas de Tarragona no se repetirá. “Somos sectores y públicos diferentes; aquí está focalizado en el waterpolo y la gente que viene es afín a nuestro deporte”, argumenta Ballarin, optimista con la afluencia de público. “El ritmo de venta de entradas anticipadas (online) es muy bueno: se ha vendido el 50% del total de entradas (109.000) y el 80% de la capacidad de las finales (27 y 28 de julio)”. Para nutrir las gradas “se han hecho esfuerzos” como implicar a la familia del waterpolo con acuerdos con los 8 clubs subsedes; habrá presencia de casales y campus de waterpolo; y en paralelo se desarrollará en la piscina del CN Montjuïc el Habawaba, un campeonato de waterpolo de jóvenes, que tendrán acceso a la grada de las Picornell. Ambiciones deportivas. En mitad del ciclo olímpico, las selecciones españolas afrontan el Europeo con elevadas expectativas. Más las chicas de Miki Oca, actuales subcampeonas mundiales que, jugando en casa, serán favoritas al oro. Sus rivales más fuertes son Hungría, vigente campeona continental –contra la que debutan el sábado 14–, Holanda, subcampeona europea y plata en la Liga Mundial, y las siempre complicadas Rusia e Italia. En hombres, el equipo de David Martín, en proceso de renovación, ha madurado muchísimo en sólo un año y ha sido finalista de la nueva Europa Cup (cayó con Croacia) y bronce en la Liga Mundial. El gran favorito es Serbia, ganador de los últimos tres Europeos y oro olímpico; y los principales aspirantes, Croacia (oro mundial y plata olímpica), Hungría (plata mundial), Italia (bronce olímpico) y la pujante Montenegro, campeón de la Liga Mundial. Ceremonias de inauguración. Habrá dos espectáculos para estrenar el Europeo. El sábado 14, a las 21.30 –antes del debut de España femenina–, las compañías Brodas Bros y Toom Pak amenizarán la ceremonia con hip-hop, danza y cultura urbana, y percusión, además de un mapping en el agua y el desfile de las 17 delegaciones (675 jugadores de 28 equipos). El lunes se repiten las actuaciones (21.30) antes del debut de España masculina.