Número uno y a octavos
Nadal desmonta a De Miñaur y buscará los cuartos por primera vez desde el 2011
Rafael Nadal se ha instalado en los octavos de final y se enfrentará al checo Jiri Vesely en busca de la eliminatoria de cuartos de Wimbledon por primera vez desde el 2011. El balear, que conservará el número uno del mundo, se impuso sin discusión al prometedor Alex de Miñaur en un enfrentamiento que, más que un partido, fue un entrenamiento de nivel para ambos. Para Nadal, porque la asequibilidad del rival le permitió probar variantes de juego e incrementar su progreso sobre hierba. Para el australiano –19 años, padre uruguayo, madre española y residencia en Alicante–, medirse al número uno en su debut en Wimbledon representa una experiencia impagable en su incipiente carrera.
Nadal ha superado tres rondas sin perder ningún set, pero mantiene cautela respecto a las perspectivas de futuro. “No lo sé, de momento estoy feliz de estar en octavos, lo que deseo es jugar bien y, como en el fútbol, seguir adelante”, manifestó al término de un partido de 2 horas y 2 minutos del que no pueden extraerse muchas conclusiones. El balear mantuvo el dominio durante toda la función después de romper el servicio del australiano en el cuarto juego. De Miñaur, entusiasta pero inferior, sólo mostró aspiraciones cuando se desprendió de la presión en el tercer set, que consiguió alargar hasta el 6-4.
Nadal explicó que no está en el All England Tennis Club para mirar al ranking, sino al título: “Prefiero ser número uno que dos, pero no he venido aquí a mantener el puesto sino a hacerlo lo mejor posible. He ganado tres partidos y estoy contento de cómo he jugado esta primera semana. Creo que lo he ido haciendo mejor cada día”.
Vesely, que superó a Fognini, medirá el lunes la progresión del balear. Es zurdo y destaca por un buen servicio, apoyado en su estatura (1,98 m), pero su posición en el ranking (93) revela el estancamiento de un tenista designado Estrella del Mañana en 2013. Con un título (Auckland 2015), el checo perdió en su único enfrentamiento precedente a Nadal.
La jornada tenística londinense se caracterizó por el interés de las gradas en el pase de Inglaterra a las semifinales del Mundial de fútbol. Los espectadores celebraron el segundo gol de Dele Alli a Suecia, en presencia del legendario Bobby Charlton, ganador de la Copa del Mundo de 1966, que presenció el partido de Nadal desde el palco real.
Resulta significativo el avance hasta los octavos de dos sacadores natos como Juan Martín del Potro y Milos Raonic. El argentino pasa a la cuarta ronda por cuarta vez en su trayectoria después de batir en tres mangas a Benoit Paire, jugador francés que fundamentó buena parte de su estrategia en la gesticulación hacia el público para intentar desconcentrar al rival. Raonic, por su parte, mostró un excelente nivel para superar a Dennis Novak con un elevado porcentaje de primeros servicios, 75 golpes ganadores y sólo veinte errores no forzados. Después de varios meses fuera del circuito a causa de lesiones, la hierba ha vivificado al canadiense.
La mayor sorpresa de la jornada sobre la hierba inglesa fue la eliminación de la número uno. Simona Halep sucumbió ante el tenis defensivo de la jugadora de China Taipei Su-Wei Hsieh, de 32 años. Con el adiós de la rumana en medio de un mar de lágrimas, la checa Karolina Pliskova queda como única top 10 superviviente en el cuadro de Wimbledon, en el que ya no figura tampoco ninguna española. Carla Suárez se mostró tan decepcionada tras su derrota en tercera ronda frente a la suiza Belinda Bencic por 6-1 y 7-6 (3) que sintió que el partido lo perdió ella, más que ganarlo su rival. “Al final del desempate no saqué como venía sacando y ella restó muy bien. Creo que en este partido he perdido yo más que me haya ganado ella”, lamentó la tenista canaria.